Redacción Ecuador
Clemencia García no entiende por qué debe pagar el doble por el suministro de energía, si el mes que pasó empezaron los racionamientos. Su caso no es el único que se registra en Quito.
“Yo siempre he pagado entre 13 y a lo mucho USD 17, pero ahora me salió USD 27”, señala García. Ella vive en el sector de Chaguarquingo, en el sur de la capital.
800 000 clientes
están registrados en la Empresa Eléctrica Quito, incluidas las zonas rurales.
Esta ama de casa, de 33 años, no encuentra la razón. Según su lógico, si cada día tiene menos disponibilidad de luz, al fin del mes debería pagar menos.
Ayer en la mañana hasta la Empresa Eléctrica Quito, ubicada en las avenidas 10 de Agosto y Las Casas, llegó Amparo Pazmiño. “Yo siempre pago USD 9, porque no paso en la casa y soy de la tercera edad. Ahora, este mes me salió USD 15. No entiendo”, comentaba en la fila. Ella vive en Conocoto, en el oriente de la urbe.
Aquel comentario desató la curiosidad entre quienes aguardaban en la fila para abonar por el servicio. Muchos empezaron a fijarse en el valor. Hubo quienes concluyeron que el valor a pagar no había variado y se mantenía.
“Vaya, reclame”, era el comentario que hacían el resto de personas que estaba ahí. “Ya voy a ver qué me dicen”, respondió.
Mónica Guerrero, del Departamento de Comercialización de la Empresa Eléctrica Quito (EEQ), explicó que los racionamientos nada tienen que ver con las variaciones en las planillas.
En su opinión, cuando se va la luz, los medidores se apagan automáticamente y dejan de marcar. “No hay razón para que se den alteraciones”.
La misma explicación dio Luis Tapia, jefe de Departamento de Energía Eléctrica de la Escuela Politécnica Nacional.
“Los medidores son unos dispositivos que se activan y desactivan con el paso de la energía, no son como los medidores de agua que en algún momento pudieran permitir el paso del aire y marcar. Esto es automático”, señaló.
Según Guerrero, en la ciudad están instalados dos tipos de medidores. Los electrónicos y los electromecánicos. En los electrónicos, cuando hay corriente, se enciende un foco rojo. En el caso de los electromecánicos, es una rueda que se ve que gira cuando hay fluido y que se queda quieta cuando no hay.
Sin embargo, la empresa EEQ dice que hay que analizar cada caso, pues hay varias razones para que la tarifa se eleve, incluso, una falla en la lectura del medidor.
El caso de Pazmiño fue analizado por el Departamento de Comercialización de la Eléctrica.
Ahí se determinó que el incremento en el valor a pagar se generó porque hubo más consumo, especialmente, en la primera quincena del mes pasado. Además, en la cartilla se incluyó el cobro de un pago vencido.
También se analizó el caso de Tránsito Lincuango, quien vive por El Inca. Los técnicos de la Eléctrica concluyeron que el aumento se debe a que en la planilla se incluyó el cobro por unos alambres que se usaron para una instalación domiciliaria.
“El próximo mes solo pagará el mínimo, que es lo que registra en el sistema hasta el momento”, manifestó Guerrero.
Sin embargo, las denuncias de que los valores por el consumo de energía aumentaron se multiplicaron ayer en Quito, en las oficinas donde se cancela por el servicio.
Por eso, Tapia hace algunas recomendaciones. Él asegura que lo mejor es desconectar los electrodomésticos. “Hay veces que cuando los artefactos están deteriorados, en el momento que retorna la luz, requieren más energía para arrancar, como en el caso de las refrigeradoras”, advirtió. También recomendó la utilización de reguladores de energía.
Mientras en la EEQ están activadas las ventanillas de servicio al cliente. Si el usuario cree que ha sido perjudicado puede acudir, con la cartilla. La denuncia también se la puede hacer vía telefónica, llamando al call center (136). Ahí con el número de suministro, le dirán cuál es la marcación de su medidor.
También se puede pedir que los técnicos revisen las instalaciones. Las fallas son una causa para que se incremente el consumo.
Testimonios
Alfonso Cifuentes/ Comerciante
‘Los alimentos se dañan y estamos perdiendo’
Soy propietario de Su Comisariato, que está ubicado en la avenida El Retorno. Los apagones nos afectan, especialmente a los comerciantes que tenemos enfriadores y congeladores. Los helados, carnes y embutidos se nos dañan. Emelnorte nos ha recalcado que no asumirá los daños y, en mi caso, ya se me dañó un refrigerador.
Los más afectados en Ibarra somos los habitantes de la ciudadela Los Ceibos. En la gallera Municipal y en el camal son algunos de los sectores donde no hay cortes de energía eléctrica. Pero aquí se nos quita hasta cuatro horas en los horarios pico. A partir de las 18:00 hay gran movimiento a lo largo de la avenida El Retorno. En esta zona hay decenas de negocios de comidas y abarrotes. Los comerciantes tenemos que cubrir deudas y no es justo que tengamos que perder en los productos que se nos dañan. La verdad es que en épocas de crisis no debería suceder esto.
Óscar Villarroel/ Sto. Domingo
‘La gente piensa que no hay atención’
Con los cortes de energía eléctrica de dos horas diarias, estoy obligado a suspender las actividades en mi negocio. En mi trabajo yo elaboro tortas que requieren refrigeración y congelado. Pero con la falta de electricidad no se logra el suficiente frío en los equipos y los alimentos empiezan a derretirse y a cambiar de sabor.
Menos mal que los cortes son solo de dos horas, caso contrario las pérdidas serían mayores. Este tiempo de falta de electricidad aún es manejable. Las consecuencias fueran peores si se aumenta el número de horas de racionamiento. Si esto sucede yo no podría producir.
Otra consecuencia es que Santo Domingo está nublado, por esta razón, los locales requieren de una permanente iluminación. Cuando los clientes observan que las luces están apagadas piensan que no se está atendiendo y no ingresan. Es lamentable.
Recomendaciones
Desconecte los artefactos. En el momento que el suministro de luz sea restablecido vaya conectando paulatinamente. Deje para el final la refrigeradora y las computadoras.
Haga revisar las instalaciones eléctricas de su casa. Si una está en mal estado pueden crear resistencia y provocar un mayor consumo de energía.
Tome en cuenta cuánta luz está gastando en el momento que retorna el servicio. Puede ser que está incrementado sus consumos al intentar adelantar las tareas del hogar u oficina que requieren de la energía.