Un sismo de 6,8 se registró a las 2:57 de la madruga del miércoles 18 de mayo de 2016 en la costa ecuatoriana, según el Instituto Geofísico del Ecuador. En la población de Bahía, en Manabí, los pobladores del Barrio Ciudadela Norte salieron inmediatamente de sus hogares luego de producirse el movimiento telúrico.
César Pinargote, de 63 años, luego de sentir el temblor en su vivienda salió con su familia a la calle Padre Laennen. En los exteriores de su hogar, otros moradores también permanecían a la espera de resguardo. Pinargote comenta que se encontraba descansando cuando se suscitó el movimiento. Su primera reacción fue alertar a sus familiares y salir a la vereda como medida de protección.
Así también Simón Aldaz, guardia nocturno, sintió el temblor en su lugar de trabajo. Aldaz cuida una antena de servicio de Internet ubicada en la calle Laennen. El hombre de 28 años detectó el movimiento telúrico por la intensidad del vaivén del alambrado que cerca el lugar. Aldaz decidió permanecer en la calle Hurtado esperando mantener comunicación con sus seres queridos.
Por su parte Estelvita Cedeño comenta que el evento natural también la despertó. Se levantó enseguida y salió con los otros miembros de la casa a los exteriores de la vivienda donde labora en las madrugadas. Cedeño trabaja cuidando a una adulta mayor en una casa ubicada en la calle Hurtado. Luego de ayudar a salir a la persona bajo su responsabilidad hacia los exteriores permaneció en la calle comentando lo sucedido con los moradores del lugar.