Largas filas de vehículos circulan lento en las primeras horas del día por la avenida 10 de Agosto, en el norte. Hay tramos donde los conductores están obligados a disminuir la velocidad, por los desniveles, producto de las zanjas que se abrieron para la colocación de los cables de los nuevos semáforos.
La obra la ejecuta la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop). Está previsto que hasta finales de noviembre concluya la primera fase de la instalación de 180 semáforos. La avenida 10 de Agosto es parte de esta fase.
En la intersección con la calle Capitán Ramón Borja, en el carril norte-sur, las zanjas generan congestión, especialmente, en las horas pico. Antonio Rodríguez espera, todos los días, a las 08:00 el bus. “El problema es que abrieron las zanjas y luego las taparon, pero quedaron a desnivel del pavimento. Entonces, los choferes tienen que frenar para que los carros no se golpeen”.
Paola Sodiro transita a diario, en su vehículo, por esta avenida. Por la ruta que toma para llegar a su lugar de trabajo, no hay vías alternas para evitar la congestión y los desniveles. “Los huecos que hicieron en la calzada no eran muy grandes, ahora, obligatoriamente, hay que frenar y eso traba el tránsito y molesta a los choferes”.
Para los conductores, el principal inconveniente son los desniveles en el pavimento por las zanjas. En algunas intersecciones como en la avenida Del Maestro, el desnivel es pronunciado.
Para el conductor Daniel Clavijo hace falta señalización para evitar percances y posibles accidentes. “Está bien que hagan trabajos, pero tienen que avisar poniendo señalización. Los desniveles no son muy visibles y los carros se maltratan”.
Actualmente, la Epmmop realiza las pruebas en los cables que fueron instalados para los semáforos. Sobre las tuberías de los cables se colocó tierra y el pavimento. Esta es una medida provisional hasta que se terminen las pruebas de los sistemas en red. Posteriormente, se pavimentará y taparán las zanjas definitivamente.
Según Cristian Quirola, especialista en movilidad y señalización vial, cuando los sistemas de semaforización son en red, como el propuesto por el Municipio, las pruebas se realizan en todas las conexiones. “Si un solo cable falla, se altera el funcionamiento de todo el sistema de semáforos que se instaló en la avenida”.
En diciembre está previsto que finalice la instalación de 180 nuevos semáforos. En esta fase está incluida la avenida 10 de Agosto. En Quito hay 830 intersecciones reguladas con esos aparatos. De estas, 430 son administradas por el Municipio y el resto por la Policía de Tránsito.
El proyecto de semaforización tiene una inversión de USD 27 626 758 y se realizará en cuatro fases, que durarán dos años. Se contempla la instalación en 600 intersecciones.
En la presentación del proyecto, Germánico Pinto, gerente general de la Epmmop, señaló que el sistema de semaforización será adaptativo y permitirá programar las llamadas ‘olas verdes’.
Ese modelo permitirá minimizar las paradas innecesarias en los sitios en donde el semáforo está en rojo y la vía de intersección no tiene flujo vehicular.
Hasta que concluyan los trabajos, se privilegiará el tránsito en las mañanas desde los extremos de la ciudad hacia el centro. En la tarde y en la noche, la prioridad será en sentido contrario.