Las plazas, calles y escalinatas de la ciudad fueron los escenarios que acogieron a miles de personas durante los actos de celebración de las fiestas de Quito, este fin de semana.
Ayer, desde temprano, decenas de personas caminaban en el Centro Histórico recorriendo los museos y las plazas.
En la calle García Moreno y Espejo, un colibrí que salía de una cascada, hecho totalmente con tizas, empezó a distinguirse en la calzada. Los artistas Rodrigo Navarrete y César Simbaña trabajaban en este anamorfismo. “Es una deformación reconstruida visualmente con la perspectiva”.
A pocos metros, un curso gratis de modelado en arcilla llamada la atención especialmente de los niños. El artista plástico, Jaime Moya, enseñaba los trucos y la técnica de esta artesanía, como parte del proyecto Quito a pie.
Frente a la iglesia de La Compañía, los turistas podían convertirse en una ficha de damas chinas y participar del juego en un tablero gigante, dibujado sobre el suelo.
En las laderas del Panecillo, el encuentro fue para los amantes de la adrenalina. A las 09:00, decenas de personas esperaban con impaciencia la clásica de Cantuña, competencia de Descenso urbano de bicicletas (downhill). Comenzó con una hora de retraso. Participaron 257 ciclistas divididos en 10 categorías. Los concursantes se concentraron detrás de la Virgen del Panecillo. Cada minuto salía un participante, que debía sortear 2 km de gradas de cemento, rampas y tablas de madera hasta llegar a la meta, en la calle García Moreno y Morales.
María Paz Vintimilla fue una de las seis mujeres inscritas en la competencia. Durante las prácticas sufrió una caída que le afectó la columna, pero no abandonó la válida. Sebastián Rodríguez salió en el puesto 19 de la categoría infantil. Lo que más le gusta de este deporte es la adrenalina.
La música también fue el ingrediente principal de los actos del fin de semana. En la noche del sábado, los ritmos gitanos de Emir Kusturica y su banda No Smoking Orchestra entusiasmaron al público, durante el pregón de San Francisco. La banda salió al escenario a las 20:50. La combinación de violines, guitarras eléctricas, trompetas y acordeones hicieron bailar y saltar a los asistentes durante una hora y 40 minutos. Kusturica invitó a varias jóvenes del público a bailar en el escenario, entre ellas, la reina de Quito, Andrea Callejas.
Los músicos que improvisaban tocando el violín con los pies, la cabeza y la boca se robaron el show. La gente quedó satisfecha. A Lorena Endara, de 34 años, le atrajo la música movida del grupo. A Raúl Peñafiel, de 50 años, las improvisaciones le parecieron muy divertidas.
Ese día, más temprano, en la av. Bartolomé de las Casas, se registraba un movimiento inusual. Se trataba de los niños y jóvenes que participaron en la tradicional carrera de coches de madera Jorge Aguilar Veintimilla. Pilotos, mecánicos y familiares ponían a punto los bólidos de madera.
Una de las familias en llegar primero fue la de Javier Valencia. En total fueron siete miembros de la familia quienes compitieron. La noche anterior, la familia estuvo reunida hasta la 01:00, pintando y revisando los coches.
En toda la competencia hubo una sola competidora mujer, que fue Yadira Valencia. Solo dos de ellos pasaron a la final que se disputará el próximo sábado, desde los túneles de El Tejar, por la Mejía.
La agenda del martes
Desde mañana hasta el 6 de diciembre, la entrada a los museos municipales será gratuita a partir de las 17:00.
En el Hotel Mercure se inaugurará el Campeonato Mundial de 40, a partir de las 19:00.
El festival, Quito Edén de Maravillas se llevará a cabo en el parque ecológico de Solanda, desde las 19:30.