Ayer, los moradores del barrio Juan Montalvo, en el sector de La Carolina, realizaron una protesta pacífica en contra del proyecto municipal para la extensión de los parqueaderos de la Zona Azul.
Desde las 06:30, la convocatoria a los vecinos se la hacía desde un megáfono instalado sobre un vehículo que recorría las calles del barrio. La alarma comunitaria sonó 20 minutos más tarde y los moradores del sector comenzaron a salir.A las 07:00, decenas de personas y comerciantes del sector se concentraron en la intersección de la av. Mariana de Jesús e Inglaterra. Con pitos y al grito de “las calles son del barrio no del Municipio”, iniciaron el plantón.
Las personas que trabajan y transitan por el sector tuvieron que caminar a sus destinos. La Policía desvió a los conductores por vías alternas, para evitar congestión.
José Ayala, presidente de la Junta Barrial, explicó que la disposición municipal no justifica los supuestos beneficios a los moradores del sector.
“Únicamente buscan el lucro municipal”.
La medida no fue difundida por las autoridades y eso también sorprendió y molestó a los moradores. La preocupación de los vecinos, dice Ayala, tiene relación con los problemas de congestión e inseguridad que puede generar el proyecto.
“Calculamos que cerca de 2 000 personas, ajenas al sector, se instalarán en las 70 manzanas del barrio. Ellos necesitarán servicios básicos con los cuales no cuenta el sector”.
Las líneas azules, que incluso se pintaron frente a las puertas de ingreso a los garajes privados, fueron cubiertas con pintura negra.
“Si pintan de nuevo las líneas azules, volveremos a poner pintura negra”, afirmó Ayala.
Francisco Viteri, morador, dijo que en los últimos días, un grupo de policías metropolitanos anotaba las placas y el tiempo que los autos permanecían estacionados en las vías. La incertidumbre sobre posibles sanciones también preocupa.Eduardo Domínguez, miembro de la Junta Barrial, explicó que se solicitó una cita con el Alcalde para exponer sus argumentos y buscar alternativas.
Una de ellas, dijo Ayala, es la construcción de parqueaderos elevados y subterráneos en los predios municipales de la zona.
El proyecto pretende ordenar el uso del espacio público, con una oferta de sitios de estacionamiento rotativo. De este modo, cada usuario podrá estacionar su vehículo por un máximo de dos horas. El control y las sanciones estarán a cargo de la Policía Metropolitana.
Las franjas azules y blancas también fueron pintadas sobre las calles del sector de Santa Clara.
Juan Castellano se estacionó con su vehículo en la Ramírez Dávalos. Al percatarse de las líneas azules en el piso, el conductor decidió permanecer en su vehículo por si algún policía municipal se acercara a sancionarlo.
“Hasta la semana pasada, este sector no era zona azul y solo se pagaba una sola vez a los cuidadores que trabajan en el sector”.
Elizabeth Sumbana atiende un local comercial en la zona. Ella aseguró que no recibió ninguna notificación sobre el proyecto. Dijo que el parqueo tarifado perjudicaría a su negocio.
“Las líneas azules aparecieron pintadas de un día para el otro”.
José Pérez, trabaja cuidando carros en la Ramírez Dávalos desde hace seis años. Hace un mes, una funcionaria del Municipio se acercó a registrar sus datos.
Germánico Pinto, gerente de la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad, reiteró la decisión de aplicar la medida. Eso, con el propósito de mejorar las condiciones de movilidad en la zona. “Es una de las 24 medidas del plan de movilidad”.
Además, informó que se destinarán 87 policías metropolitanos para garantizar la seguridad en La Carolina y La Pradera.