Los transeúntes que circulan por un tramo de la avenida Colón, en el centro norte de Quito, deben sortear obstáculos. Entre las avenidas 6 de Diciembre y 10 de Agosto hay tubos plásticos que sobresalen de la acera; también hay huecos. Esta situación se repite a lo largo de seis cuadras.
Para Lilia Cruz, transeúnte que acudió a la zona para realizar trámites en una dependencia pública, la presencia de estas estructuras que, por lo general, están en los bordes de las veredas, representa un riego.
En el sitio no hay rótulos que adviertan la presencia de estos objetos. “Las personas que están distraídas se podrían caer. Los tubos son estorbos”, dijo.
Irma Amaguaya, comerciante que tiene un puesto en esta vía, mencionó que la última vez que ella vio obreros trabajando en el soterramiento fue hace un mes. Luego de que se arreglaron las aceras y se dejaron los tubos sobresalidos, ella no ha notado cambios. Lo que sí se produce con frecuencia son pequeños accidentes. “Los transeúntes que caminan despistados se tropiezan y caen”.
Por ahora en la zona aún hay cables colgados. Cada empresa es la responsable de removerlos. El retiro de los postes le compete a la Empresa Eléctrica Quito. Sin embargo, esta acción no se la puede ejecutar mientras no se haya bajado todo el tendido, para no afectar a la dotación de los servicios que existe en el sector.