El verdor de las hojas contrasta con el negro de los troncos quemados. Este es el paisaje que ahora acompaña a deportistas y visitantes del Parque Metropolitano Guangüiltagua, en el norte, a seis meses del voraz incendio que consumió 52 hectáreas.
En la memoria de Farith Chemali, quien vive por la av. González Suárez aún están presentes las llamaradas que consumían la vegetación, el 22 de septiembre pasado. Las veía desde su casa. Él acude casi todos los días al parque con su bicicleta.
Durante este tiempo, la zona afectada ha reverdecido. Las lluvias pusieron su parte. También ha sido reforestada con 3 000 árboles nativos, entre pumamaquis, alisos, arrayanes y cholanes.
Según María del Carmen Matovelle, analista de Medioambiente de este espacio municipal, el bosque se ha regenerado de forma parcial. Si bien en las copas de los árboles y sus troncos ya brotaron las hojas, explica que falta recuperar la parte del sotobosque. Es decir, los arbustos.
Hay especies como el quicuyo y la chilca que no han tenido problema y están creciendo. Sin embargo, hay otras como la chivo caspi, huagra manzana y chamana que requieren de más tiempo. Matovelle agrega que se requieren de unos tres años para que el ecosistema se regenere en su totalidad, incluso para que regresen los animales y aves.
Al ciclista Pablo Terán le impresiona la recuperación. Él recuerda que la zona entre los miradores del Ilaló y Las Puntas estaba devastada. “De los árboles solo quedaron los troncos, en el suelo había ceniza”. Ahora, la vegetación está frondosa y de color verde, de diferentes tonalidades.
Tras el incendio, se aplicó un plan de remediación que se lo desarrolló en tres fases.
Lo primero que se hizo fue sacar el material vegetal quemado. Hubo voluntarios como los ‘scouts’, moradores de la comuna del parque y estudiantes secundarios que ayudaron en la tarea.
En la segunda fase se rehabilitó el mobiliario del parque. El fuego afectó a los miradores 3, 4 y 5, un asadero, barandas y esculturas. Por ejemplo, las bancas que quedaron carbonizadas junto al mirador Las Puntas fueron reparadas y recuperaron su pintura verde.
Las caminerías y senderos están habilitados. Como son de tierra, el problema allí es la acumulación de agua lluvia. Algunos deportistas han sufrido caídas. Chemali pidió que además se dé mantenimiento a los baños, pues algunos no tienen ni agua.
Matovelle indica que de esta fase hay trabajos pendientes como el de las tuberías, que se reemplazan paulatinamente.
Finalmente, se trabajó en la remediación ambiental, restitución de capa vegetal y siembra de nuevas especies. En un año se podrá evaluar los resultados de estas especies. Fuera del área afectada se sembraron 3 500 árboles.
Lo que está pendiente es la intervención en las laderas que colindan con la av. Simón Bolívar. La Secretaría del Medio Ambiente del Municipio apoya con estudios que ayudarán a definir las mejores opciones. Usuarios que trotan por lo extremos del parque coinciden en que falta intervenir estas zonas. Desde fines de diciembre pasado todas las áreas afectadas por el fuego fueron habilitadas a los usuarios. El parque, que tiene 557 hectáreas, recibe 7 000 visitantes los fines de semana y un promedio de 400 personas entre semana.
No Olvide
Para comunicarse con la administración del parque puede llamar al 246 9568.
Está totalmente prohibido encender fogatas. Hay asaderos en el sitio.
No se permite fumar en el interior del parque. Hay vigilancia permanente.
[[OBJECT]]