El metro de Quito será autosustentable a partir del 2030

La construcción de la Línea 1 del metro costará USD 1 386 millones. El 50% será un aporte del Gobierno Nacional, para lo cual se firmó un decreto ejecutivo el 28 de abril.

Según el alcalde Augusto Barrera, el primer desembolso será de USD 200 millones, que deberán constar en el presupuesto del Estado del próxima año.

El 50% restante lo cubrirá el Municipio con dos fuentes de ingresos. La primera con la tarifa de USD 0,40, que servirá para financiar los costos de operación y mantenimiento. La segunda, con deudas que adquirirá para la infraestructura. La Línea 1 tendrá 15 estaciones y la construcción de cada una tendrá un costo de entre USD 25 000 y 30 000.

Barrera indicó que el Municipio tiene una capacidad de endeudamiento de entre 18 y 26 millones anuales. Analizan varios mecanismos como créditos en el Banco del Estado (BEDE), con la Corporación Andina de Fomento (CAF) o con el Banco Mundial.

Para cubrir la deuda, se recurrirá a la optimización del sistema de recaudación y a la actualización del catastro municipal.

Una conclusión del estudio de factibilidad económica del proyecto, es que a partir del 2030, el metro será autosustentable.

Vicente Alcaraz, técnico de la Empresa Metro Madrid (responsable de los estudios), explicó que la mayor parte de los ingresos del metro provendrán de la tarifa de USD 0,40, que se actualizará cada tres años. También habrá aportes de las actividades comerciales que se generarán como publicidad, arriendo de locales en las estaciones y venta de certificados de reducción de emisiones.

Los técnicos españoles realizaron un análisis coste-beneficio para medir la rentabilidad social. Entre los beneficios que generará el metro están el aumento de la productividad, reducción de la contaminación, menos accidentabilidad, disminución del ruido y ahorro energético.

Se prevé que el sistema requerirá entre 40 y 50 megavatios para su funcionamiento. Para el abastecimiento, se buscará acuerdos con el Gobierno Nacional, para que a través de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec) suministre energía.

Está previsto que se creen 3 000 fuentes de empleo, durante la fase de construcción y operación. Además, el proyecto facilitará la inclusión socioeconómica de parroquias y zonas rurales y se potenciará el Centro Histórico.

El próximo paso será iniciar con los estudios de ingeniería de detalle. Ayer se firmó un convenio de cooperación entre la Unidad del Metro de Quito y el Instituto Nacional de Preinversión (INP) para el desarrollo de los estudios de soporte, complementarios y de diseños de ingeniería del metro.

A través del convenio, el Gobierno Nacional aportó con USD 20 860 000, con asistencia técnica y seguimiento.

A partir del 2030, una vez cancelada la deuda, los ingresos por los pasajes servirán para cubrir los costos de operación y mantenimiento del metro. Esta es otra de las conclusiones del estudio de factibilidad económica, que presentó el martes la empresa Metro Madrid.

Con la tarifa fijada para los usuarios, los ingresos serán de cerca de USD 50 000 000 en el primer año de funcionamiento del metro, previsto para el 2016. Por estas razones, los técnicos de la empresa Metro Madrid concluyen que sí hay viabilidad financiera del proyecto.

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