Atrás del Hotel Quito está Guápulo, barrio tradicional. La avenida Conquistadores se convirtió en el límite entre la capital y el valle de Tumbaco.
En lo que parece una quebrada está la iglesia de Guápulo. La imagen de Nuestra Señora de Guadalupe, que allí se venera, fue tallada por Diego de Robles en los años cincuenta.
En 1596 el obispo López Solís, devoto de la Virgen, tramitó la edificación de la iglesia.
El lugar es un atractivo turístico. Los visitantes, a más de ir a visitar la iglesia, pueden tener una vista de los alrededores de Cumbayá, desde el mirador. Además, podrán disfrutar de un café o vino hervido, en la noche, en las cafeterías del sector.