Las múltiples actividades cotidianas y el acelerado ritmo de vida de sus padres y profesores inspiraron a 20 estudiantes del Colegio San Gabriel a elaborar un producto que beneficie a la salud y combata los malestares del estrés.
Una pequeña almohada con propiedades relajantes y analgésicas fue una de las cuatro opciones que fueron sometidas a una encuesta en el Colegio. Mr. Pillow fue nombrada la idea ganadora para desarrollar la empresa que participó en el concurso anual de emprendedores de la Fundación Junior Achievement.
Antes de la elaboración de la almohada, los jóvenes realizaron investigaciones y estudios para determinar las propiedades de cada uno de los 13 tipos de plantas que utilizan para la elaboración: clavo de olor, cedrón, eucalipto, menta, lavanda, linaza, canela, pimienta, anís, tilo, manzanilla, hierbaluisa y romero.
La empresa está conformada mayoritariamente por estudiantes de sextos cursos. Está estructurada por cuatro gerencias: producción, marketing, recursos humanos y finanzas. Los estudiantes son gerentes de esas áreas.
La inversión inicial fue de USD 350. Las 30 acciones de la empresa se vendieron hasta en USD 6 cada una en la Bolsa de Valores, el capital se incrementó a USD 530. Gustavo Mafla, gerente general, asegura que la empresa está constituida legalmente y tienen proyecciones de continuar con la producción después de graduarse. Con las ganancias obtenidas aspiran a incrementar la producción y patentar su idea.
“Es un producto muy rentable y tiene muy buena acogida por los compradores”, comenta Mafla. Él describe a la almohada como innovadora, útil y original.
El fin de la jornada académica en el Colegio solo da inicio al horario para que los jóvenes empresarios arranquen con las tareas de producción de las almohadas. Hasta cuatro días a la semana, cinco horas diarias, ellos se dedican a confeccionar y rellenar el producto. Los pupitres de las aulas se transformaban en las mesas de trabajo, siempre acompañados de las bromas y risas que disimulan el cansancio.
Mafla cuenta que se organizan en estaciones para seguir una línea de producción. La tarea que requiere más tiempo es el pesado de las plantas. “Nos toma cerca de ocho horas. El relleno y cierre de la funda son más rápidos”.
La almohada tiene dos cubiertas, un forro térmico que mantiene el calor y absorbe la humedad, y sobre este otro forro azul o verde con el logo de la empresa. El costo de confección de cada funda de almohada oscila entre USD 0,25 y 0,35. El relleno es una tarea conjunta. Cada colaborador se lleva una cantidad de almohadas a su casa para sellarlas.
El costo de producción de cada almohada, incluido el forro es de USD 1,79. El precio de venta al público: USD 5. En este año escolar han vendido 400 almohadas. La ganancia: USD 1 284.
Un porcentaje de ese valor será destinado a la Fundación Fe y Alegría, que está dirigida por los curas salesianos. La labor social es un aspecto fundamental en la formación de los estudiantes del San Gabriel, destaca Mafla.
La publicidad fue importante para dar a conocer el nuevo producto. Samuel Veloz, del Departamento de Recursos Humanos, fue el encargado de promocionar a Mr. Pillow en un programa radial. “Hacía menciones e informaba sobre las propiedades de la almohada”. Además, se elaboraron volantes y banners para las ferias donde se presentaron.
El producto fue comercializado, principalmente, en las ferias organizadas por la Fundación Junior Achievement, entre profesores, familiares y amigos.
La línea de producción de las almohadas Mr. Pillow está detenida. Se acercan los exámenes de grado y los jóvenes empresarios se preparan para su incorporación.
Sin embargo, la apuesta por el desarrollo de su empresa sigue vigente. Los jóvenes dicen que las aspiraciones de ver convertidos sus esfuerzos en algo tangible y productivo los incentiva a mantener viva una iniciativa que va más allá de un proyecto estudiantil.
Sobre el producto
Modo de uso. La almohada se calienta en el microondas entre un minuto y medio y dos minutos y medio. Se coloca la funda térmica y se aplica en el área afectada del cuerpo.
Tiempo de vida. Con el uso adecuado y siguiendo las indicaciones respectivas, la almohada medicinal puede durar de seis meses a un año.
Propiedades. Siete de las plantas utilizadas en la almohada tienen propiedades curativas y analgésicas. Las demás son utilizadas para la relajación y terapia
para combatir el estrés.