La Ordenanza que regula la aplicación del pico y placa en la ciudad puede ser reformada el 1 de enero o el 1 de julio de cada año. Ya se han escuchado propuestas, especialmente de algunos concejales sobre los cambios que se deben aplicar para el segundo semestre de este año.
Pero el alcalde Augusto Barrera, en una entrevista con este Diario, dijo que no considera que sea el momento de ampliar la restricción a 12 horas diarias, que es una de las propuestas que toma más fuerza. En su opinión, se debe esperar hasta que operen completamente los corredores viales de transporte público.
Los miembros de la Comisión de Movilidad del Concejo Metropolitano tienen ya algunas propuestas. La posición de Eddy Sánchez es extender la restricción vehicular a todo el día. Sin embargo, aclaró que todavía no se conocen los informes detallados sobre la efectividad de la medida.
“Por el crecimiento del parque automotor, se hace necesario extender los horarios de restricción. Actualmente, luego del horario del pico y placa, hay congestión. Esto no sucedería si extendemos el horario de restricción”, añadió Sánchez. La Comisión espera el informe para una resolución.
La concejala María Sol Corral también es partidaria de ampliar los horarios. Su propuesta personal es que el pico y placa se aplique todo el día, pero concuerda con Barrera en que hay que fortalecer la operatividad del Corredor Sur Oriental, abrir el Corredor Sur Occidental y completar la rehabilitación de la vía exclusiva del trolebús.
Según Corral, cuando se complete la flota de 80 buses articulados que el Municipio adquirió, se podrá trasladar a 250 000 personas. “Con eso, nosotros deberíamos estar listos para que en septiembre, cuando los estudiantes vuelvan a las aulas, tengamos ya una alternativa para el pico y placa”. La concejala espera que en las próximas semanas se revise en la Comisión de Movilidad la Ordenanza y presentar una propuesta al Pleno del Concejo.
Para ella, el que se amplíe la restricción sería beneficioso también desde el punto de vista ambiental y liberaría a la gente del estrés, producto de la congestión.
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Al referirse al tema, el concejal Fabricio Villamar considera que el problema de movilidad en Quito es, junto a la inseguridad, uno de los puntos que requieren de rectificaciones. El edil opina que una revisión de la Ordenanza debe incluir a los taxistas en la restricción del pico y placa. “Por corresponsabilidad y porque tenemos que hacer migrar ese sistema a uno amigable con el ambiente”.
Villamar dijo que si hubo más de 18 000 inscripciones en el proceso de regularización de taxis, “quiere decir que tampoco estamos generando a la ciudad características de desarrollo económico básicas”.
“Siento que la ciudad tiene un problema de liderazgo. Se refleja en el hecho de que no podemos combatir los graves problemas de inseguridad y de movilidad”.
Otra de sus propuestas es que la obra vial se realice durante las noches. Para Corral, esto no puede ser solamente una disposición. “Usted no les puede ordenar a 400 ó 500 personas que vayan a trabajar en la noche. Hay que tener en cuenta los turnos y la seguridad de los obreros“.
En este escenario, los ediles se aprestan a analizar la efectividad del pico y placa en la ciudad, para decidir las reformas.
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Las tendencias
El Observatorio de Movilidad envió un informe que revela que entre enero y mayo del 2011 se mantiene la tendencia de infracciones de un auto cada dos minutos, desde mayo del 2010.
El documento señala que el número de infracciones diarias ha disminuido en un 12% en relación con los cinco primeros meses del 2010.
La cifra de infractores reincidentes creció en un 27%, frente a los cinco primeros meses de la medida.
Para hacer la medida más efectiva, el Observatorio sugiere, entre otras cosas, que se redistribuya la oferta del transporte público en relación con la demanda, luego de realizar un estudio.