Vehículos que circulan a exceso de velocidad, transeúntes que no utilizan los pasos peatonales y choferes que giran en U y a la izquierda son las principales infracciones que se comenten en la avenida Simón Bolívar (Nueva Oriental).
Por esta vía, que conecta el extremo norte con el sur de Quito, circula un promedio de 4 500 vehículos por hora, según la Dirección Nacional de Tránsito (DNT).
En un recorrido por los 34 kilómetros de la Nueva Oriental, realizado por este Diario, se constataron los peligros a los que se exponen los usuarios.
El riesgo, especialmente para los conductores, es mayor en los 17 cruces que hay en esta vía.
Desde la Panamericana Norte, sector de Carapungo, hasta el redondel que conduce a la parroquia Zámbiza (5 km) no hay cruces y el riesgo es menor.
Terrenos inhabitados, áridos y rocosos dominan el paisaje a lo largo del trayecto. A unos 100 m al sur de la entrada de Carapungo hay una improvisada parada de furgonetas. Estas unidades de la compañía Transporte Periférico se dirigen a Cumbayá y Guajaló.
Melly Reinoso, contadora de la compañía, asegura que sirven a unos 4 000 usuarios. Este es el primer punto de aglomeración en la av. Nueva Oriental, desde el norte. Allí también se parquean buses interprovinciales.
María Gualoto, de 40 años, utiliza esta vía cada lunes para ir a su trabajo en Llano Chico. Prefiere hacerlo por allí porque solo hace siete minutos. Su viaje por la Eloy Alfaro puede demorar hasta unos 40 minutos, en horas pico.
El peligro se acentúa a la altura del kilómetro 6, en el sector de Nayón. Un cruce señalizado con pintura blanca sobre el asfalto alerta a los conductores, que van en sentido norte-sur. Pero, hay usuarios que circulan en sentido sur-norte y también lo utilizan. Ese giro prohibido e intempestivo hace que los conductores que van por la vía rápida frenen a raya.
Algo similar ocurre frente al parqueadero Monteolivo (km 8), a unos 400 m del intercambiador de la Vía Interoceánica (km 11), en el desvío a Cumbayá (km 14) y a la altura del barrio Alma Lojana, en el km 19.
Ya en el sur también hay problemas. Los barrios asentados a los costados de la avenida y las nuevas construcciones son las causas. Hay cruces peligrosos en el barrio Patrimonio Familiar (km 21), a la altura de la Loma de Puengasí (km 23), frente al barrio San Patricio (km 25), en el ingreso a La Forestal (km 25,5) y en el ingreso a San Martín de Porres, que tiene tres cruces a lo largo de 1 km.
Según Juan Zapata, vocero de la DNT, en vías como la Nueva Oriental, con un alto tráfico, no se debe permitir tantos cruces.
“Los carros que giran generan potenciales puntos de riesgo de accidentes. También debería haber islas de alojamiento, en el caso de que un vehículo se dañara, pero no las hay”.
Uno de los cruces, donde más accidentes ha registrado la Policía, está al frente del barrio Alma Lojana, que conecta a Collacoto y a la Gral. Rumiñahui.
Marina Chiluiza vende empanadas a un lado de la vía y ha visto múltiples choques. “Los carros pasan demasiado rápido, hasta van en contravía para bajar a la autopista”, dice.
Un punto conflictivo era el cruce frente al ingreso a la Universidad Internacional, pero fue cerrado por el Municipio.