La Comisión Nacional de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial (Cntttsv) emitió, el 9 de diciembre pasado, la disposición de pintar las placas de los vehículos de servicio público sobre el techo de las unidades.
Según la normativa de la Cntttsv, publicada en los medios, el plazo para que los transportistas cumplan con esta nueva reglamentación culminó el 20 de diciembre pasado. Esta medida es parte del plan de seguridad que impulsa el Gobierno.
El propósito es disminuir los delitos como secuestros exprés, asaltos a bordo de taxis, robo de vehículos, entre otros. Además, se busca que los carros sean monitoreados por helicópteros policiales.
Manuel Romero, taxista de la cooperativa Guamaní, en el sur, fue uno de los primeros conductores que pintó la placa de su auto Hyundai Getz, sobre el techo de manera transversal. “No he recibido ninguna notificación de los dirigentes. Lo hice por cuenta propia”, dijo el chofer, de 45 años.
Romero guarda en una carpeta el recorte del comunicado difundido por la Cntttsv. Allí se puede leer que la normativa rige para todos los vehículos de la transportación pública. Es decir, taxis, expresos escolares, buses urbanos, intercantonales e interprovinciales. El anunció lo firmó el director de la Cntttsv, Ricardo Antón.
Sin embargo, en Quito, la disposición causa confusión entre los transportistas. Vladimir Jara, de la Unión Provincial de Taxistas de Pichincha, explicó que a esa organización no ha llegado ningún comunicado oficial de la Cntttsv.
Los taxistas de la organización que pintaron las placas lo hicieron por su propia cuenta, por el anuncio difundido en la prensa.
Jara agregó que el gremio espera una resolución de la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas del Municipio. Esta dependencia deberá pronunciarse si la disposición se aplica o no en la capital.
Mientras tanto, la organización de los taxistas cuenta con un oficio en el cual la Policía Nacional anunció que en la capital todavía no se realizarán operativos de control en las calles.
“Con la transferencia de las competencias del tránsito, por parte de la Cnttttsv al Municipio, todavía el tema de la obligatoriedad de pintar o no las placas no está claro”, manifestó Jara. De hecho, la Policía no ha realizado controles en las calles del Distrito, mientras se discute el tema, durante esta semana.
La Dirección Nacional de Tránsito informó que la normativa emitida por la Cntttsv se acoge al artículo 139 de la Ley Orgánica de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial.
Así, según la Ley, quienes no acaten la disposición, incurren en contravención leve de primera clase. La sanción es una multa equivalente al 5% de la remuneración básica unificada y la reducción de 1,5 puntos en la licencia de conducir.
El numeral C, del mismo artículo, determina que “el transporte público de servicio masivo de personas deberá contar con los distintivos e identificación reglamentarios”.
José Santamaría, dirigente de la Cámara de Transporte de Pichincha, que agrupa al sector de los buses urbanos, manifestó que hay propietarios de buses urbanos que ya han cumplido con la disposición por iniciativa propia.
De acuerdo con la normativa, los buses y minibuses deben tener pintada la placa a lo largo del techo. En color negro si el techo es blanco y blanco si es de otro color.
En el caso de los buses y minibuses, las letras y los números de la placa pintados en el techo del vehículo, deberán tener una altura de 60 cm y en color negro. En los taxis es similar.