Hasta el 6 de enero, en el Centro Cultural Metropolitano, se exhiben los 10 nacimientos finalistas del concurso de pesebres artísticos, organizado por el Municipio. La mayoría están elaborados con materiales no tradicionales. Un ejemplo es el pesebre El ciclo del amor, de Damián Pérez, en el que se utilizaron tapas, envases de plástico y CD. Los personajes de Círculos de Ternura, de Emilia Pineda, están hechos de cáscara de huevo de codorniz. Entretanto, Jaime Puetate, utilizó yucas y mazorcas, en Armónico nacimiento. Este año, el pesebre ganador fue Navidad 2001, realidad y fantasía, elaborado por Luisa González. Está inspirado en las casas del Centro Histórico.