En Valencia (España) se firmó, ayer, un convenio de colaboración entre la Consejera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, y el Municipio de Quito. Generalitat (conjunto de instituciones de autogobierno) participará en el proceso de construcción de la primera línea del metro de la capital ecuatoriana.
Generalitat aportará con la experiencia y conocimientos acumulados en la gestión y construcción de infraestructuras ferroviarias. En un principio, el asesoramiento se materializa a través del Ente Gestor de la Red de Transporte y de Puertos de la Generalitat (GTP), y otras entidades o empresas públicas autonómicas o empresas privadas, relacionadas con la construcción de infraestructuras o prestación de servicios de transporte.
Hasta ahora, el Distrito Metropolitano de Quito ha desarrollado los principales estudios del proyecto del Metro de Quito y tiene previsto iniciar las obras a finales de este año. La primera línea contará con 15 estaciones y un presupuesto de USD 1 500 millones. Este tipo de acuerdos, según los involucrados, permite que el modelo de gestión de infraestructuras desarrollado en la Comunidad de Valencia sea exportable a otros países, regiones y ciudades, incorporando a las empresas que han participado en el mismo.
En ceremonia especial, que se cumplirá este viernes 19 de octubre, a las 11:30, en el Centro de Convenciones Eugenio Espejo, el Municipio recibirá del Programa de Urbanismo de la Universidad de Harvard, el estudio de Impacto Urbano que generará el proyecto del Metro de Quito. El documento permitirá conocer los beneficios del metro para la urbe.