El alcalde de Quito, Augusto Barrera, presentó anoche el informe de su primer año de gestión municipal, ante 1 300 asistentes. La calle Espejo lucía diferente. A la salida del Teatro Bolívar, en el centro de la ciudad, la Banda Municipal amenizaba la velada con canciones tradicionales. Las personas que pasaban por el lugar se quedaban escuchando la música y viendo a los sanqueros hacer piruetas con fuego. A las 19:20, Barrera ingresó en medio del aplauso de los presentes. Simpatizantes del Burgomaestre, funcionarios como el presidente de la Asamblea, Fernando Cordero, representantes de organizaciones barriales y ciudadanos estuvieron ahí.El acto comenzó con una función teatral representada por el grupo Arte Social. En la obra se hizo referencia a los cambios que ha experimentado la capital. La banda de rock, Sal y Mileto, entonó fuertes sonidos. La agrupación Bocapelo también participó. A las 19:56, un video mostró los avances de la gestión. Luego, Barrera, Cordero y los concejales subieron al escenario.El Alcalde comenzó su intervención a las 20:16. Su terno negro contrastaba con una camisa blanca y corbata concho de vino. Reconoció que han habido aciertos, pero también frustraciones. Afirmó que se han invertido más de USD 250 millones en obras. Entre los principales puntos que presentó estuvo la renegociación del contrato para terminar la construcción del aeropuerto de Tababela, “con la cual la ciudad se ahorró USD 600 millones”. En el tema de movilidad recalcó la aplicación del plan pico y placa, con el cual alrededor de 12 000 vehículos han sido sancionados hasta la fecha. También se refirió a la regeneración de los túneles de San Juan, San Roque y San Diego, y a las reformas geométricas en los redondeles de tránsito. Estaba previsto que el presidente Rafael Correa esté presente. No asistió y en su reemplazo envió a la ministra de Coordinadora de Patrimonio, María Fernanda Espinosa.Por otro lado, los locales ubicados alrededor del teatro atendían al público con normalidad. Esto luego de que a las 12:00 fuera revocada la disposición de anteayer del comisario No. 1 de la Zona Centro, Santiago Páez. Este dispuso que los locales y restaurantes ubicados en el pasaje Espejo debían suspender sus actividades y la atención al público a partir de las 17:00, bajo prevención de ser clausurados.