Desde el 2008, para sancionar a los conductores de vehículos mal estacionados en Quito se cuenta con dos bases legales: una, la Ordenanza Metropolitana 247 y, la otra, la Ley de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial. En estas, los montos para multar a los infractores, con relación al actual salario básico, tienen una diferencia de USD 136.
En la primera, en el artículo I.479 (9) se establece que la Emsat (Empresa Metropolitana de Servicios y Administración del Transporte) conjuntamente con la Policía de Tránsito realizará operativos para verificar el buen uso del suelo por parte de los conductores. Las personas que infrinjan las disposiciones municipales serán sancionadas con el 50% de la remuneración básica unificada (USD 170) .
La Ley de Tránsito, por su parte, en el artículo 140, numeral e, dice que este tipo de contravención es sancionado con tres puntos menos a la licencia de conducir y el 10% del salario básico (USD 34).
En la ciudad, hasta el miércoles pasado, cuando el alcalde (e) Jorge Albán anunció que se reducirán este tipo de multas se aplicaba la Ordenanza metropolitana y no la ley.
Juan Zapata, ingeniero en Tránsito y Transporte, explicó que desde que entró en vigencia la Ley de Tránsito, en el 2008, se debió aplicarla para sancionar este tipo de contravenciones. Esta normativa es nacional y jerárquicamente está sobre cualquier Ordenanza. “En la ciudad con la medida anunciada recién se estaría acatando esta disposición”.
Pese a que la Ley de Tránsito estaba vigente, Marcelo Ordóñez, conductor, comentó que en noviembre pasado gastó alrededor de USD 170 para pagar la multa y movilizarse para buscar su automóvil.
Él acudió a realizar una gestión en la Administración Zonal Eloy Alfaro y cuando salió el sitio que ocupaba el carro estaba vacío. Los agentes de tránsito le informaron que habría estado sobre un cruce cebra.
En la ciudad, este tipo de infracciones son recurrentes. Ayer, en las avenidas 12 de Octubre, Colón, Coruña, González Suárez, De los Shyris, así como en las calles Jerónimo Carrión y Grecia, las aceras, pasos cebras, costados de las calzadas, ciclovías y rampas de acceso a los garajes eran usados como estacionamiento.
Solo en la avenida 12 de Octubre, desde la Vicente Ramón Roca hasta la Colón, en el norte, se identificaron a 38 vehículos y 13 motocicletas mal estacionadas. Los pretextos para usar el espacio eran diversos.
Johana Cadena, por ejemplo, dejó su camioneta sobre la ciclovía de la Jerómino Carrión para abrir la puerta del garaje y buscar al conductor que le obstruía el paso. “Hay ocasiones extremas en que debemos infringir la Ley”.
Por esta razón para esta conductora, la medida de reducir las multas a los conductores que se estacionen en sitios no permitidos es “correcta”.
Los peatones que transitan por el sector tienen una opinión diferente. A la altura de la calle Wilson, la acera se convierte en un parqueadero. Las personas tienen que sortear los carros o caminar por las calles para avanzar en su recorrido.
Javier Ortiz, transeúnte quien se dirigía hacia la avenida Patria, comentó que la medida tomada por la Municipalidad no contribuye a la seguridad. “Si la gente sabe que la multa es menor, ya no habrá tanto cuidado”.
La falta de estacionamiento, es otro de los pretextos, en la esquina de la Luis Cordero, el espacio asignado para los peatones se había convertido en un parqueadero de motos. Ayer, a las 11:00, había ocho.
Patricio Arroyo, motociclista, mencionó que no tenía otra opción. Él trabaja como mensajero y requiere detenerse varias veces para entregar la correspondencia. Para él la medida de reducir las multas para quienes se estacionen en sitios no permitidos es “pura campaña”.
Ayer, durante una entrevista radial, el presidente Rafael Correa planteó la opción de ofrecer disculpas a las personas que se vieron afectadas con la medida y reembolsar los valores.
Sin embargo, antes de reformar el valor de las multas, se requiere de un proceso al interior del Concejo Metropolitano.
Fabricio Villamar, concejal, mencionó que el anuncio realizado por Albán carece de valor legal. Para cambiar el monto en este tipo de multas se requiere una reforma a la Ordenanza. Para ello es necesario realizar dos debates.
“Ningún concejal tiene facultad para reformar las ordenanzas por sí solo”, aseguró.
Desde el 11 de noviembre del 2013 hasta ayer, la Agencia Metropolitana de Tránsito, AMT, ha emitido 2 991 sanciones a los conductores por estacionar en lugares no permitidos. En promedio esto representaría USD 508 470. Las entidades a cargo de la recaudación son la AMT y la Empresa Pública Metropolitana de Obras Públicas.
Los sitios en donde esta problemática es más recurrente son las avenidas Mariscal Sucre, Rodrigo de Chávez, Pedro Vicente Maldonado, 6 de Diciembre y Eloy Alfaro.
En contexto
El alcalde (e) Jorge Albán anunció el miércoles pasado la reducción del valor de las multas por estacionarse en lugares no permitidos. El monto que rige actualmente es en base a lo que establece la Ley de Tránsito. Con esto, la normativa municipal ya no será aplicada.
2 991 Multas dio la AMT a los mal estacionados, en tres meses.