Los peatones que circulan por la avenida 10 de Agosto, en el tramo comprendido entre las calles Feliciano Checa y Juan Pablo Arenas (una cuadra), no podrán usar la acera del lado occidental. Desde el pasado lunes, un grupo de obreros levanta el pavimento de las veredas para reemplazarlo por adoquines.
Para facilitar el desplazamiento de los transeúntes, se colocó sobre el carril exclusivo del trole un corredor metálico. La estructura tiene 2 metros de alto y 1 de ancho.
Hay accesos para entrar a los negocios. En la puerta de ingreso a los locales se colocaron tablas que sirven como rampas.
En ese trayecto, el trole circula por el carril convencional. Este es compartido con los conductores de autos particulares. Cuando pasa la calle Arenas, vuelve a ocupar la vía exclusiva para recoger a los pasajeros de la parada La Alameda, en sentido norte-sur.
Julio Castillo, abogado, transita a diario por esta zona. Para él, andar por el pasillo metálico es incómodo, porque es estrecho. Por ello decidió caminar por las aceras que aún no han sido levantadas. “Hay mucha gente. Las veredas no están tan deterioradas”.
Silvia Ulloa también usó el corredor metálico para caminar. Ella se dirigía a la Maternidad. Aseguró que aunque las obras causan molestias se debe cooperar para que las veredas estén en mejor estado. “Es más seguro ir por aquí. En la acera hay obreros y herramientas”.
El obrero Luis Oña mencionó que la rehabilitación de la acera, en esa cuadra, durará 45 días. Cuentan con 11 personas. Se trabajará en dos turnos. Mientras se desarrolla esta labor, las personas deben circular solo por el corredor metálico. “Es peligroso que caminen por las aceras”.
Una vez que concluyan el arreglo, se intervendrá una cuadra más al norte. Desde la calle Feliciano Checa hasta la José Riofrío. Según el Instituto Metropolitano de Patrimonio (IMP) se van a rehabilitar dos cuadras.
Aparte de remplazar el asfalto por adoquines, se construirán ductos para soterrar los cables de luz eléctrica, teléfono, televisión por cable, entre otros. En total estos trabajos durarán tres meses. Se invertirá cerca de USD 950 000.
Nancy Jimpikit trabaja en una panadería que funciona en el sector. Ella considera que su negocio se verá afectado por esta obra. “Hay mucho polvo. No sé si la gente entre a comprar”. En el sitio funcionan cerca de 25 locales, entre farmacias, cabinas telefónicas, joyerías, bazares, etc.
Ayer, los obreros continuaron picando el pavimento de la vereda. Empezaron a hacerlo en la esquina de la calle Feliciano Checa. En las vías aledañas no hubo presencia policial.
Luis Toapanta, funcionario de la Empresa Metropolitana de Transportes, fue el encargado de controlar el tránsito. Cuando se acercaba un trole, con su mano derecha hacía una señal para que los conductores se detengan y quede la vía libre para que el trole se cambie de carril. No se produjo congestión vehicular.
Trabajo en las aceras
Material. El pavimento de las veredas será reemplazado por adoquines de hormigón. El tramo que se va intervenir empieza en la calle Juan Pablo Arenas y termina en la José Riofrío.
Tiempo. La obra completa durará tres meses.
Seguridad. Los peatones que transitan por este sector deben usar el corredor metálico que se instaló sobre el carril del trole.