Un contingente de 32 bomberos de la provincia del Guayas, llegó la noche del sábado a Quito.
Su misión será ayudar a sofocar los intensos incendios forestales que devastan extensas zonas de la capital, desde hace dos meses.
El grupo de apoyo está integrado por miembros de las compañías de los cantones Yaguachi, Milagro, Santa Lucía, Naranjito, Pedro Carbo, Isidro Ayora, Lomas de Sargentillo y Daule.
Ayer fueron enviados a un incendio que se producía en los sectores de Martha Bucaram y en una de las laderas del cerro Atacazo, al sur de la urbe. Ahí fueron apoyados por ocho de los 26 bomberos de la provincia de Tungurahua, que llegaron hace tres días.
El resto de uniformados descansaba en las instalaciones de la Estación número 7, en el sector de Barrionuevo, en el sur. Eduardo Villavicencio, jefe del Cuerpo de Bomberos de Baños, comentó que, hasta el momento, no han tenido dificultad en controlar los incendios en Quito.
“El terreno es idéntico al que nosotros nos desenvolvemos en nuestra provincia”. Para el bombero la característica de estos incendios es que por el verano se reseca la vegetación y esta se prende como un papel.
La presencia de los bomberos de otras ciudades del país responde al estado de emergencia declarado por el alcalde Augusto Barrera, el viernes anterior.
Freddy Villavicencio contó con orgullo que ha combatido cuatro incedios en Quito. Es la primera vez que realiza un trabajo fuera de su provincia. Sin embargo, no le tiene miedo al fuego.
Junto con sus compañeros ha dormido, solo seis horas desde que llegaron por eso tienen que aprovechar el tiempo libre para comer algo y descansar.
A las 13:00, mientras algunos se bañaban y otros conversaban en sus literas, recibieron la noticia de la Secretaría de Gestión de Riesgos. Esta les indicaba que permanecerían en la ciudad hasta segunda orden, porque los incendios continúan en la capital y se requiere de su apoyo.