Los nuevos contenedores se colocarán en 44 rutas, de las cuales 38 estarán en el sur y 6 en el norte de Quito. Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
El servicio del Sistema de Recolección Mecanizada se amplió a otras zonas del norte y sur de Quito. Ayer, miércoles, 23 de septiembre, se realizó la entrega de 4 520 contenedores de basura a la comunidad.
Se trata de la tercera fase del sistema que apunta a beneficiar a unos 650 000 personas, cubriendo el 28% de la ciudad. Aunque la cobertura de este sistema llegará al 40% si tomamos en cuenta las dos fases anteriores.
Como se sabe, la contenerización empezó en el 2012 con la instalación de las rutas en el norte y en el 2013, en el sur. En esos años se colocaron 2 100 contenedores para 300 000 beneficiarios (el 12%).
Esos recipientes, de 2 400 litros y de 3 200 litros, se colocarán en 44 rutas, de las cuales 38 estarán en el sur y 6 en el norte de la ciudad. Las primeras instalaciones comenzaron ayer, a partir de las 21:00, y se prolongará hasta el 27 de septiembre, en los sectores de Chimbacalle y Santa Ana (sur de la urbe).
Paulatinamente este proceso pasará por otras rutas, para finalizar con la recolección en el Girón del Sur y Mariscal Sucre en la segunda semana de febrero del 2016,
Los 4 520 contenedores estarán en casi todas las administraciones zonales: en Carapungo (cuatro rutas), Calderón (cuatro), desde Ponciano hasta Naciones Unidas (19), desde la av. Colón hasta La Mariscal y La Floresta (9), Chimbacalle y Santa Ana (dos) y desde Chillogallo hasta la Emilio Uzcateguí (cuatro rutas).
Juan Pablo Muñoz, coordinador de Diseño y Programador de Servicio de la Emaseo EP, indicó que la consultoría realizada en el 2011 para establecer lugares factibles de contenerizar se actualizó y se mantuvo el parámetro de ubicar los recipientes en zonas consolidación; es decir, lugares que ya no tendrán un crecimiento poblacional.
De acuerdo con eso se hizo la planificación. Primero se determinaron los límites de las zonas (llamadas geo-cercas), luego un levantamiento del volumen de residuos y de acuerdo a eso se determinó el número de contenedores que tendrá cada una de las 44 rutas. Pero en términos generales, según Muñoz, tendrán entre 90 y 100 recipientes.
Foto: Vicente Costales / EL COMERCIO
Esta implementación de nuevos contenedores fue valorada por Eduardo Espín, director de la Escuela de Ingeniería Ambiental de la Universidad Central, pero al mismo tiempo señalo un inconveniente: “No se hace una recolección diferenciada y lo importante ahora es hacer una separación de materiales. Ya es tiempo que nos embarquemos en un sistema integral, separando materiales en la fuente”.
Y propuso aquello porque, como indico el especialista, “eso permite valorizar los desechos”.
Ante ese comentario, Muñoz apunto que si hay planes para hacer esa separación diferencia; un plan piloto se implementará en los sectores de La Floresta y La Mariscal.
En cambio, para el 2016 se analiza la posibilidad de expender el Sistema de Recolección Mecanizada al 70%, ya arrancaron los estudios para ampliar el servicio en los valles (Conocoto, Armenia, Alangasí, Cumbayá y Tumbaco).
Todo dependerá, agrego Muñoz, si estos sectores cumplen con las características para ser beneficiados; es decir, que la pendiente no sea elevada, pues con un pequeño empujón el contenedor puede virarse. Otras condición es que la zona sea consolidada (que no haya terrenos baldíos), facilidad vial, entre otros.
En estas últimas zonas se está viendo la posibilidad de instalar una tecnología alterna a la de los contenedores porque, dijo Muñoz, “no siempre es bueno manejar una sola tecnología, en otros países se utiliza contenedores plásticos, contenedores metálicos, contenedores diferenciados”.
El éxito de la tercera fase y de las dos primeras dependerá de la colaboración activa de la comunidad. Por lo que se llevarán adelante campañas de educación enfocadas en el adecuado manejo de los residuos sólidos y el buen uso de los contenedores. En estos recipientes se colocan solo los residuos que se acostumbre a poner en las bolsas de basura, jamás residuos de construcción, o tereques.
Paralelamente la Emaseo creó un mecanismo de contacto directo con la ciudadanía denominada “EMASEO SOLUCIONA” para atender de manera eficiente y eficaz las denuncias, inquietudes y dudas.
El aumento del 28% en el servicio, permitirá que la comunidad disponga además de los contenedores de carga lateral, 19 vehículos para lavado y recolección que se unen al ya existente.
El proceso incluye la modernización de la flota vehicular de Emaseo y la creación de nuevos servicios de aseo que tienen el objetivo de priorizar sectores vulnerables de la ciudad como: “Mercados + Limpios y Saludables”.
Los daños
La vida útil de los contenedores es de 10 años, y hay casos de vandalismo que les quema o les chocan. De los 2 100 contenedores que están instalados actualmente el 3% sufre siniestros (quemados, chocados) mensualmente. Los grafitis tiene un porcentaje mayor, pero eso no afecta a la funcionalidad del contenedor.
Los problemas a los bienes ocurren cerca de los mercados o en los límites a donde llega el sistema de contenerización. Cada contenedor, en promedio, cuesta USD 2 000 y vienen de Italia, la primera fase también fue de Italia y la segunda de España.