En la calle República, peatones intentan cruzar con un coche de niño. Foto: Alfredo Lagla / EL COMERCIO
Para Mayra Benavides es un tormento cruzar la 12 de Octubre, en el redondel de la plaza Artigas (norte). Ahí, los vehículos pugnan por pasara en el sentido sur-norte y, a los peatones, no les queda más que esperar una pausa en el flujo de automotores y correr.
“Para cruzar hay que esquivar a los vehículos y hacerlo rápido. Todo se pone peor al mediodía. Es como que quienes conducen no pensaran en que también necesitamos cruzar la calle”, dijo Benavides.
El sábado 17 de marzo del 2018, ciclistas, peatones y gente involucrada en la movilidad sostenible de la ciudad tendrá su primer reto: elegir a cuatro representantes para la mesa interinstitucional que vigilará el cumplimiento de la Ordenanza 194, que prioriza la caminata y la bicicleta como formas alternativas de moverse en la ciudad.
En la elaboración de esa normativa participaron varias organizaciones de ciclistas pero solo una que se dedica, de manera exclusiva, a exigir los derechos de los peatones como actores de las vías.
La Asociación de Peatones de Quito es la única que, de manera organizada, trabaja con base en las necesidades de quienes caminan en la ciudad. “Todos somos peatones en algún momento”. Esa es la frase con la que Álex Naranjo, presidente de la Asociación, intenta describir la importancia del trabajo que realizan.
Casos como el de Benavides son los que intentan abordar los seis integrantes activos de la Asociación de Peatones. Como parte del trabajo que realizan, identificaron varios puntos problemáticos en Quito. La intersección de la avenida 12 de Octubre con la Colón, según Naranjo, es uno de esos lugares conflictivos.
Para que este tipo de temas se aborden en la mesa interinstitucional, la Asociación presentará a su candidata: Karina Gallegos. Para ella, que caminar sea un acto tan cotidiano, y que no esté asociado a un elemento como la bicicleta o el vehículo, no permite crear una identidad que provoque reclamos organizados para mejorar las condiciones de movilidad para este actor de las vías.
“Los ciclistas tienen una pasión por la bicicleta, igual que muchos conductores con sus vehículos. Los peatones no tenemos ese elemento material y ha hecho que nos acostumbremos a que no se respeten los derechos que tenemos”, dijo Gallegos.
Pero, ¿cuáles son los problemas para caminar en Quito? Naranjo explicó que los redondeles son los puntos de mayor vulnerabilidad para los peatones en el momento de cruzar. También los pasos cebra son conflictivos. Según Naranjo, en las intersecciones, los giros derechos están diseñados para que el vehículo no se detenga para ceder el paso.
“Es más inseguro estar en el cruce cebra, que pasar por la mitad de la vía. Para exigir el uso de los pasos cebra, por ejemplo, hay que pensar primero en cómo está diseñada la ciudad”, dijo Naranjo.
El uso de las aceras como parqueadero es otra queja constante. Para la Asociación, el que haya conductores que no conciben que los peatones deben tener siempre la prioridad al ser los más vulnerables, también es un problema.
Respecto de esos problemas plantean tres exigencias. Gallegos dijo que lo primero por hacer es generar un equilibrio en la asignación del presupuesto para atender las necesidades de peatones, ciclistas y conductores. Después, con ese presupuesto habría que pensar en invertir en seguridad para el peatón. “No se trata tanto de la convivencia entre actores sino que se debe respetar una escala de vulnerabilidad, en la cual, la persona que camina es la más expuesta”, dijo.
El tercer punto, para la Asociación, es que se reconozcan los derechos del peatón. “Como referencia, en el Reglamento de la Ley de Tránsito, por ejemplo, se nombra al peatón como vulnerable, pero en el momento del control no hay derechos sino que se intentó establecer multas contra él”.
De acuerdo con la Ordenanza 194, la Secretaría de Movilidad tiene hasta el 22 de mayo próximo para conformar la mesa interinstitucional. Aparte de los cuatro integrantes de la sociedad civil, estará el Secretario de Movilidad, el Supervisor de la Agencia Metropolitana de Tránsito, el gerente de la Empresa Pública Metropolitana de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop), la Secretaria de Ambiente y un concejal designado por el Concejo Metropolitano de Quito.
La asamblea del sábado, de acuerdo con lo que se definió en la primera reunión con los colectivos, tendrá dos momentos. En el primero, solo los ciudadanos o miembros de los colectivos conformarán binomios (principal y suplente) para presentar su visión y sus propuestas.
Una vez que los participantes definan a sus representantes, se realizará un acto formal en el que el secretario de Movilidad del Municipio quiteño, Fausto Miranda, designará a los cuatro elegidos como representantes a la mesa.