PROMESA INCUMPLIDA

En alguna de las recientes intervenciones del presidente Correa, tuvo el acierto de tratar un tema de enorme significación para el Buen Vivir ciudadano. El seguro de salud.

El seguro de salud del IESS cubre las necesidades de un grupo reducido de la población de bajos recursos que tienen que someterse a un régimen riguroso, severo, intolerante, de fijación de plazos impuesto por la limitación de disponibilidad de recursos,  de profesionales especializados y la vigencia de un modelo de gestión que no logran atender con eficiencia, al menos, a este grupo especial de atención obligada.

El resto de ciudadanos se encuentra desprotegido a pesar de la existencia de docenas de empresas privadas de seguros de salud operando en el país, los altos costos de las primas de afiliación mantienen al margen de este servicio, con el agravante de que suspenden la vigencia de pólizas, después de los 65 años, época de la vida cuando más se necesita.

El presidente Correa ofreció públicamente regular este asunto de vital importancia para  mejorar, en forma efectiva, la calidad de vida del pueblo ecuatoriano. Prohibido olvidar señor Presidente.

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