Miembros de la Seguridad Presidencial identificaron y detuvieron al presunto propietario del celular, desde donde fueron enviados los mensajes al Alcalde de Tabacundo. Foto: Diego Pallero/ EL COMERCIO
En la audiencia que se desarrolló este 15 de abril del 2015 no se permitió la presencia de la prensa. Solo dos familiares del detenido, por supuestas amenazas en contra del presidente Rafael Correa, lo acompañaron. Más tarde ingresaron a la sala personal de la Presidencia, Ministerio de Justicia y policías.
La diligencia duró una hora y 15 minutos. Al final, según el abogado William Tito, su cliente recibió prisión preventiva y se le ordenó que sea llevado al Centro Regional de Cotopaxi mientras se investiga el hecho. Esto ocurrió el martes, cuando el jefe de Estado realizaba un recorrido por Pedro Moncayo.
El Alcalde de este cantón Frank Gualsaqui, fue quién recibió dos mensajes de texto en el que le advertían presuntamente matarlo junto a Correa.
A las 18:19, al enterarse del fallo, los familiares del detenido se llevaban las manos a la cabeza y lucían preocupados. Incluso tenían los ojos rojos, pero aún así ninguno quiso dar detalles del hecho.
Horas antes, mientras el supuesto implicado relataba su versión ante el fiscal, el hombre explicó que incluso era líder político de Alianza País. Repetían que él no tenía ningún motivo para cometer ese hecho.
Más tarde, en la audiencia, volvió alegar su simpatía por el partido oficialista y presentó un carnet de afiliación a partido de Gobierno en ese cantón.
Sin embargo, la decisión del juez Raúl Chimborazo fue que se abriera una instrucción fiscal por 90 días para determinar si estos mensajes constituirían una amenaza real.
Los últimos en salir de la Unidad Judicial fueron agentes Inteligencia que trabajan para la Presidencia.