El Cabildo busca reorganizar el transporte troncalizado y público para preparar la llegada del Metro, en el 2019. Foto: Archivo / EL COMERCIO
El Municipio de Quito priorizará los temas pendientes en el sistema integral de movilidad y fortalecerá los proyectos sociales para grupos vulnerables durante el 2018, según la Alcaldía. El presupuesto general del Cabildo subirá, para el próximo año, a USD 1 563,5 millones. Y en el 2017 llegó a USD 1 375,9 millones.
La idea es partir del Metro como la columna vertebral de un sistema integrado de transporte público. Por ello, la Empresa Metro de Quito recibirá cerca de un millón más que en el 2017. Está previsto que este sistema de transporte entre en su período de pruebas en la primera mitad del 2019.
Así, el rubro que cambió fue el destinado a la construcción del Metro. Este subió de USD 660,2 millones a 894,9 millones. Por otro lado, el presupuesto municipal bajó de USD 715,7 millones a 668,6 millones.
De acuerdo con la pro forma presentada el pasado 8 de diciembre ante el Concejo Metropolitano, que contó con solo dos votos a favor, la Secretaría de Movilidad recibirá el año entrante USD 4,8 millones, lo que significa USD 2,2 millones menos que el 2017.
Para lograr la reducción en el presupuesto destinado al Municipio, excluyendo el Metro, se realizaron recortes en áreas como la Secretaría de Hábitat, las empresas de Movilidad y Obras Públicas y de Agua Potable y Saneamiento.
Además, a partir de que a mediados del 2017 el Concejo decidió aumentar la tasa de recolección de basura, también se eliminó la inversión en Emaseo, pues esta empresa dejará de percibir ingresos desde el Municipio y deberá ser autosustentable.
Rodas explicó que parte del presupuesto destinado a movilidad se invertirá en el fortalecimiento del sistema de bicicleta pública, con un enfoque de movilidad sostenible.
Además, en el 2018 se trabajará en la aplicación de un esquema de peatonalización de más calles en el Centro Histórico de la ciudad y se trabajará en otros aspectos pendientes en la reestructuración del sistema de transporte público.
Esto incluye, por ejemplo, el rediseño de rutas y frecuencias, la implementación del sistema inteligente de transporte, la remodelación de paradas y la instalación progresiva del sistema integral de recaudo, empezando por el servicio municipal troncalizado y terminando en el servicio de las empresas privadas.
En cuanto al rubro de financiamiento como fuente de ingresos, la cifra varía de USD 35,2 millones en el 2017 a 52,4 millones en el 2018. Según Miguel Dávila, administrador general del Cabildo, ese cambio obedece a que en el 2017 había un crédito que incluía USD 30 millones para Quito Cables, pero finalmente no se hizo.
En la pro forma para el próximo año no está previsto un endeudamiento, sino solo recuperar cartera vencida por USD 35 millones. El resto corresponde a las cuentas por pagar de obras realizadas el año pasado, a través de créditos.
Dávila agrega que entre los planes del Municipio está realizar -el próximo año- un crédito por USD 160 millones, que no consta en el Presupuesto pero que tiene el objetivo de financiar varias obras, especialmente de la Epmmop. La idea también es destinar USD 8 millones a los vehículos de recolección de basura que quedaron pendientes del año que está por terminar y que son el último aporte del Cabildo para esa empresa.
De concretarse ese crédito, dice Dávila, la Epmmop invertirá en otros proyectos como la construcción de un estacionamiento y una plaza para el Centro de Convenciones Bicentenario y el bulevar Comité del Pueblo, en el norte.
Para el sur se planean obras civiles para la consolidación del Parque Carollo, el bulevar de La Michelena y la Plaza Atahualpa. También estarán en ese proyecto obras de infraestructura en las nueve administraciones zonales, reconformación de la capa asfáltica urgente en diversos sectores de la ciudad, etc.
El presupuesto asignado a la Epmmop que alcanza alrededor de USD 70 millones y que equivale a la mitad del asignado para el 2017, servirá para cumplir con sus gastos operativos y administrativos normales, como el pago de sueldos, agua, luz, teléfono, movilización, mantenimiento de vehículos, etc. Además incluye “obras de arrastre de este año”; es decir, obras que deben completarse en el 2018.
El Cabildo reforzará en alrededor de dos millones la inversión en educación, recreación y deporte. Esto incluye dinero asignado a los colegios y escuelas municipales. El presupuesto tiene variaciones mínimas en cuanto a inclusión social y salud. En esta área está el Patronato San José.
En contexto
El Cabildo redujo el presupuesto para su trabajo en diversas áreas y reforzó la inversión en el Metro de Quito, que es la obra prioritaria en la ciudad. En movilidad se busca reorganizar y fortalecer tanto el transporte como la bicicleta y la peatonalización.