En las calles Pedro Gual y Chile se ubicaba el antiguo Mercado Municipal. Allí se levanta la Plaza Reales Tamarindos. Foto: Mario Faustos/ EL COMERCIO
En la zona cero de Portoviejo se levantará la Plaza Mayor Reales Tamarindos. Ese será uno de los polos de desarrollo para construir la nueva ciudad.
Seis meses después del terremoto que golpeó a la capital manabita, ya están los diseños de las obras, cuya construcción arrancará en dos meses.
En el centro de Portoviejo, en las calles Pedro Gual y Chile, se ubicaba el edificio Bravo, que fue demolido por daños estructurales.
Nelo Bravo era su dueño y ahora va dos veces por semana a esa zona. El hombre se queda en el lugar hasta por dos horas para ver el desolador panorama del sector.
El edificio estaba frente al Centro Comercial Municipal, demolido el 29 julio. Bravo, de 57 años, sabe que en ese lugar se construirá uno de los proyectos más ambiciosos para recuperar el centro de Portoviejo. En el lugar hay montañas de escombros, maquinaria trabajando y algunos recicladores que buscan metal y plástico para revender. Para ingresar al sector se necesita un salvoconducto otorgado por las autoridades seccionales.
La nueva plaza se extenderá en 4 200 m2 de terreno, con una inversión estatal de USD 1,5 millones. Esa obra, que fue diseñada y proyectada por el Municipio de la ciudad, estará a cargo del Gobierno.
Recuperar la zona cero es importante para el Cabildo. Pero el proyecto de reconstrucción incluye otros sectores que serán intervenidos a través de un proyecto integral que se extenderá hasta el 2025.
El alcalde Agustín Casanova tiene la visión de convertir a Portoviejo en una ‘ciudad policéntrica’. De ahí que el proyecto contempla ejes de desarrollo en el centro, hacia el noroeste y en el sur.
El plan establece el crecimiento agroindustrial, potenciamiento turístico, ‘cluster’ de salud y modernización de los servicios básicos. Además, comprende la atención a las siete parroquias rurales, con conexiones de agua potable y vialidad. Y la consolidación de tres ciudades satélites: Calderón, Río Chico y Crucita.
La zona céntrica, donde se registró la mayor devastación, será intervenida de forma integral. Se tiene previsto regenerar 64 manzanas. A más de la plaza mayor, en el diseño están la construcción de centros comerciales ‘para-autónomos’. Se reubicará a 900 comerciantes que perdieron sus locales en el terremoto del 16 de abril.
Algunas calles serán cerradas para crear bulevares y dar prioridad al peatón. También se construirán parques y plazoletas artísticas. Según Casanova, las obras comenzarán en los próximos dos meses.
Portoviejo tiene la asesoría de especialistas de EE.UU. y Dinamarca, que colaboraron con la reconstrucción de Manhattan (Nueva York), luego de los atentados a las torres el 11 de septiembre de 2001.
En el eje noroeste, la obra más importante es el complejo Villanueva, que se ubicará en los terrenos del antiguo aeropuerto Reales Tamarindos. El proyecto contempla 1 400 viviendas de clase media alta, edificios públicos, zona rosa…
Este complejo está en análisis desde el 2014 y será la oportunidad para ejecutarlo como parte de la reconstrucción. En enero del 2017 comenzará con la delimitación de macrolotes. Los estudios de factibilidad costaron USD 350 000. El Municipio contempla el apoyo de la empresa privada.
Ahora funciona ahí el albergue más grande de la ciudad, con más de 1 000 personas. En ese sector también se construye el parque La Rotonda, frente a la Universidad Técnica de Manabí. Tendrá juegos extremos como canopy y pared de escalada y pistas de skate. El terreno comprende 129,6 m2.
En el polo sur se proyecta turismo en salud, con la construcción del hospital de especialidades, que contará con 528 camas, en la vía Portoviejo-Santa Ana. Allí se ubicarán hoteles, farmacias y clínicas de servicio complementario para la nueva casa de salud.
A pocas cuadras se edificará el Campus del Milenio, a cargo del Gobierno, que tendrá un instituto tecnológico, polideportivo, escuela y 520 soluciones habitacionales.