La intención del Gobierno ecuatoriano de terminar unilateralmente los tratados internacionales de Promoción y Protección Recíproca de Inversiones con 19 naciones causa preocupación.
El presidente de la Federación Nacional de Cámaras de Comercio del Ecuador, Blasco Peñaherrera Solah, fue ayer a la Corte Constitucional para evidenciar su malestar por esta propuesta.
Según el empresario, de concretarse el pedido del Ejecutivo se pondría en riegos las relaciones con países que han sido considerados amigos de Ecuador. Entre ellos Canadá, China, Brasil, Finlandia, Chile, Suiza, Argentina, España, Francia, Perú, Suecia, Venezuela, Alemania, Estados Unidos, Paraguay y El Salvador.
La Corte tiene en sus manos un pedido para que se dictamine si esos convenios violan o no la Carta Magna. En caso de que su respuesta sea positiva, la Asamblea pudiera recomendar su terminación.
Por eso, Peñaherrera pidió a los vocales de la Corte Constitucional que se abstengan de emitir un dictamen a favor.