Todas las señales que emite el Palacio de Carondelet indican que una crisis de gabinete está en marcha.
Al enroque entre los titulares de los ministerios de Defensa y Agricultura, ayer se sumó un nuevo cambio en el equipo ministerial del presidente Rafael Correa.
La modificación llegó al Ministerio de Inclusión Económica y Social, donde Ximena Ponce fue relevada de sus funciones luego de dos años. Ella había llegado al Gobierno en abril del 2010, luego de renunciar a la Concejalía de Quito a la que había llegado en la lista del alcalde Augusto Barrera.
La separación de Ponce resultó sorpresiva hacia fuera del Gobierno. Entre otras razones, porque en la mañana del miércoles participó normalmente en el II Gabinete con Movimientos Sociales, pero por la noche abandonó su despacho tras ser notificada de la decisión presidencial.
De forma provisional la ministra coordinadora del área social, Doris Soliz, asumirá sus tareas. Y el lunes se oficializará el nombre del nuevo titular del Ministerio de Inclusión Social.
Según un documento de evaluación de los cinco años de gobierno, la política social ha sido uno de los campos en que todavía se esperan mayores avances.
“Hay que avanzar más rápidamente en los conceptos de equidad y redistribución”, explica Fander Falconí, titular de la Secretaría Nacional de Planificación (Senplades). Por ello, señala que el recambio ministerial debe ser leído como una profundización programática del Gobierno.
De hecho, desde la esfera académico, se señala que si bien hubo avances desde el Ministerio de Inclusión Social, no han sido suficientes. El economista Fernando Martin cree que sí hubo mejoras en la reducción de pobreza, “pero no ha sido tan impactante como todos pensábamos hace dos años, cuando el Gobierno puso como prioritaria esta área”. Enfatiza en que los USD 35 de Bono de Desarrollo Humano son una forma de asistencialismo que no logra sacar de la pobreza a la gente.
Pero la administración de Ponce también ha tenido otras dificultades. Entre ellas figura la denuncia del asambleísta Galo Lara (Sociedad Patriótica), quien dijo que en el Ministerio existió un supuesto mal manejo de fondos destinados para el seguro de vida de los beneficiarios del bono.
También hubo reclamos por parte de funerarias nacionales. La razón: la compañía encargada de reembolsar el dinero por los servicios exequiales prestados a los familiares de beneficiarios del bono de desarrollo, tuvo atrasos de hasta de cuatro meses. Además, los funerarios se quejaron por los bajos precios que se les pagaban por los servicios ofrecido.
Más cambios
El ajuste al gabinete en Carondelet continuará, como una prolongación de los nombramientos ministeriales realizados en noviembre del año anterior.
El Ministerio de Relaciones Laborales aparece como una de las instituciones en las que pudiera concretarse otra modificación. En la Presidencia se apunta a que el titular de esa cartera, Richard Espinosa, será candidato a ocupar funciones en el área social. No obstante, los cambios se oficializarán el lunes, día en que está previsto que se realicen las posesiones de los nuevos ministros.
Las modificaciones en el gabinete se registran en una coyuntura preelectoral, en la que Alianza País y el presidente Correa se han fijado como meta seguir en el sillón presidencial y mantener el control de la Legislatura.