El prefecto de Cotopaxi, César Umaginga, no pudo ingresar hoy a su despacho. Desde las 06:00, 50 policías equipados con equipo antimotines (escudos, cascos y bases lacrimógenos) resguardaban las puertas de acceso a la Corporación provincial. El edificio está en las calles Quito y Tarqui, en el centro de Latacunga.
Umaginga vestido con una chonca caqui y camisa blanca arribó a las 07:45 hasta los exteriores. A esa hora le esperaba un grupo de empleados y trabajadores para apoyarle. También arribó una delegación de la comunidad de Zumbahua.
Allí se entrevistó con su personal más cercano. Aseguró que iniciarán una vigilia para impedir que la prefectura sea asaltada y que en las próximas horas presentará una denuncia en la Fiscalía por usurpación de funciones en contra de Blanca Guamangate, viceprefecta. “Ha traicionado al movimiento indígena y ahora está aliada del Gobierno”, dijo enojado.
Según él, la actuación de los 8 alcaldes y la Viceprefecta, reunidos el viernes en la Cámara Provincial, es ilegal, porque hace 15 días impugnó la resolución emitida por la Contraloría General del Estado en el que le destituía del cargo y le obliga a cancelar una multa de USD 5 280.
Allí la Contraloría lo inculpó de extender nombramientos sin cumplir con los procesos de concursos de merecimientos y oposición. También, de haber suscrito contratos de trabajo con parientes de los consejeros y de la propia autoridad nominadora.
Hasta el mediodía al menos 60 personas permanecían en las afueras de la prefectura con relativa calma. Umaginga aseguró que iniciarán movilizaciones en toda la provincia para apoderarse de los municipios y de la prefectura.
El gobernador de Cotopaxi, Milton Suárez, en rueda de prensa desmintió que haya persecución política. “Lo que hizo la Asamblea Provincial es decidor una resolución de la Contraloría. El Gobierno nada tiene que ver en estos procesos”.