El gobierno venezolano sustituirá a su máximo representante diplomático en Quito. Ese cargo es ejercido desde hace ocho años por Óscar Navas Tortolero, un ex mayor del Ejército venezolano y amigo personal del presidente Hugo Chávez. Con motivo de estos cambios en la misión diplomática venezolana, el presidente Rafael Correa condecoró a Navas en el Palacio de Carondelet.
Dentro de esta ceremonia, Navas comentó sobre un tema interno del país: la consulta del 7 de mayo. Al respecto, dijo que el triunfo del Gobierno en ese proceso electoral fue de “10 a 0”. Por su parte, Correa recurrió a su discurso antiimperialista, para cargar contra Estados Unidos, por la sanción que impuso la semana anterior a la petrolera estatal Pdvsa. “Rechazamos las sanciones impuestas a Pdvsa, que es lo mismo que decir a Venezuela. Nuestra solidaridad combativa frente a las agresiones, frente a las actitudes prepotentes, retardatarias del imperio”.
Una de las últimas actividades de Navas será coordinar la visita oficial que el martes Chávez realizará a Salinas. El nuevo embajador será Fernando Sanz.