La polémica surgida el sábado pasado, ante el planteamiento de que el Gobierno eleve de USD 35 a USD 50 el Bono de Desarrollo Humano con las utilidades de los bancos privados se encendió aún más la mañana de este viernes.
En las páginas de los periódicos circuló un comunicado de seis puntos en donde la Asociación de Bancos Privados exponía sus reparos al anuncio de Correa. Pero de inmediato, el Primer Mandatario, aprovechando una entrevista radial realizada en San Miguel de los Bancos (Pichincha), volvió a afilar los dardos contra la banca.
Aseguró que ya están trabajando en el marco normativo que permitiría usar, al menos unos USD 200 millones, de las utilidades que generan los bancos, para financiar el Bono de Desarrollo Humano, a partir de enero próximos. Es decir un mes y medio antes de las elecciones presidenciales.
De momento, las posiciones lucen irreconciliables. En el referido comunicado la banca señala que ya aportan al Estado con USD 309 millones anuales por concepto de impuestos, tasas y contribuciones, lo que representa casi el 80% de sus utilidades netas que percibe el sector.
En ese sentido señalan que “no es admisible que el sector bancario asuma adicionalmente, el costo de cualquier proyecto gubernamental”, porque el 85% de los recursos que le queda a la banca, tras el pago de todas sus obligaciones estatales, se reinvierten en créditos y servicios financieros.
En ese sentido, el comunicado en mención deja entrever una “posible limitación al legítimo derecho a la propiedad privada”.
Correa, en su entrevista radial, que fue retransmitida por varias cadenas más, comentó: “Cuando ganan los bancos, solitos (los beneficios) para ellos, cuando pierden, que paguemos todos como en la crisis (bancaria) del año 1999. Ahora la tortilla se vuelve, ahora que tienen utilidades gigantescas, históricas, vamos a hacer las reformas para trasladar al menos 200 millones de dólares para financiar el Bono de Desarrollo Humano”.