Otra organización internacional alerta sobre el deterioro en Ecuador de las libertades de expresión y prensa. El Instituto Internacional de la Prensa (IPI, por sus siglas en inglés) dio a conocer las principales conclusiones que surgieron luego de la visita que realizaron al país entre el 7 y el 11 de mayo.
El informe tiene 28 páginas, donde plasma muchas de las estrategias gubernamentales para asediar a los medios de comunicación privados.
La tónica del informe es similar al de otras organizaciones y ONG internacionales que han evaluado la situación en Ecuador. El IPI, fundado en 1950, es la organización internacional dedicada a velar por la libertad de prensa más antigua del mundo. La misión vino en mayo pasado y estuvo integrada por su subdirector Anthony Mills y por la asesora del IPI para América Latina, Mariela Hoyer. Ellos se reunieron, entre otros, con el vicepresidente Lenín Moreno, el secretario de Comunicación, Fernando Alvarado y delegados de los medios privados.
Entre los temas que más preocupación ha suscitado “es la elaboración de proyectos legales diseñados para debilitar a los medios independientes y el uso sistemático de un discurso ofensivo, difundido públicamente a través de los medios de comunicación del Gobierno, para empañar la reputación de periodistas (…)”.
Mills señaló que Ecuador está“en medio de una crisis de libertad de prensa”. A su juicio, el gobierno del presidente Rafael Correa ha promovido “un ataque público desde varios frentes contra los medios privados”, donde es el pueblo ecuatoriano el afectado porque “su derecho a recibir información independiente está siendo amenazado”.
IPI, en su visita de mayo pasado, dijo que había esperado encontrar un país en plena etapa de reflexión, luego del polémico desenlace de los juicio contra El Universo y los autores del libro ‘El Gran Hermano’, donde se dictaron sentencias millonarias, hubo una amplio cuestionamiento a la independencia de Justicia, y el posterior perdón de Correa.
No obstante, los delegados del IPI encontraron que la batalla del Gobierno contra los medios de comunicación se ha radicalizado. El reporte critica las dos leyes aprobadas en el Ecuador, la Antimonopolio y las reformas al Código de la Democracia. “La primera parece restringir la capacidad de los medios independientes de incrementar su capital, mientras las reformas electorales limitan de informar a los votantes”.
El IPI también muestra su inquietud por el alcance que tendrían la Ley de Comunicación y el nuevo Código Penal, en caso de llegar a ser aprobados.
Otros aspecto que se resalta en el informe es “el frecuente abuso de las cadenas para silenciar o distorsionar la crítica”, tomando en cuenta la amplia plataforma mediática que controla el Ejecutivo a través de los medios estatales, oficialistas e incautados. “Hay una palpable sensación de miedo y resignación entre los periodistas y en las salas de redacción, lo que ya está generando autocensura”.
Hoyer cree que es esencial para los medios y el Gobierno entender y respetar sus roles en una sociedad democrática. Pidió a la prensa “valorar el periodismo ético y a instaurar sistemas de autorregulación para lograr una mayor credibilidad”. Y exhortó al Gobierno a cesar su confrontación y a eliminar todas las leyes que penalizan la difamación.
Lea el informe de IPI sobre Ecuador