La Comisión de Derechos de los Trabajadores y la Seguridad Social presentó el informe para segundo debate del proyecto para la jubilación especial de las mujeres. Este no tuvo el respaldo de Alianza País sino de Nívea Vélez, Consuelo Flores (Madera de Guerrero), Silvia Salgado (socialista), Kléber García (PSP), Enrique Herrería (ex M. de G.) y Scheznarda Fernández (ex PSP, aliada del oficialismo).
Fernández, presidenta de la mesa, indicó que proponen que la mujer tenga la opción de jubilarse a los 55 años con 360 imposiciones, que es igual a 30 años de aportaciones al Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social.
“Es un informe sustentado técnica, legal y económicamente, fue suscrito por seis asambleístas y llamo a la conciencia de los 124 legisladores, para que en un acto de estricta justicia aprobemos este proyecto. También le pido al Presidente de la Asamblea que lo considere y lo ponga en la próxima sesión del Pleno”, dijo Fernández. Criticó que los legisladores del MPD no suscribieron el documento.
Salgado aseguró que estudiaron dos alternativas 30 años de aportes sin límite de edad y 30 años de aporte con un piso de 55 años. Sostuvo que se tomó la decisión en base a un análisis financiero actuarial preparado para este tema. “Se cruzaron variables en torno al impacto económico que implica, tener una población de más de 100 000 mujeres, por lo que se requerirían más de 10 000 millones de dólares”.
Salgado explicó que si una mujer de 55 años se jubila, su esperanza de vida es de 78 años, por lo que se necesitaría contar con una reserva actuarial para 20 ó 25 años promedio.
“No es que al otro día el IESS debe tener ese dinero. La alternativa de los 55 años se definió al conocer que habría 36 mil mujeres potencialmente beneficiarias. Un promedio de 8 000 mujeres, por el carácter voluntario, se acogería en el primer año en que se apruebe la ley. Esto baja el impacto económico y mantiene el equilibrio del sistema del Seguro”.