El gobierno de Rafael Correa busca restar legitimidad a la movilización nacional convocada por organizaciones y grupos sociales de izquierda.
Ayer, Betty Tola, ex vicepresidenta de Pachakutik que ahora dirige el Ministerio de la Política, descalificó a los protagonistas de las manifestaciones. Y sostuvo que hay una motivación de corte proselitista tras las marchas.
“El MPD y sectores de la derecha están buscando protagonismo que les permita tener una mejor posición en el proceso electoral”. La funcionaria negó que la movilización oficialista prevista para el miércoles tenga el objetivo de ser una ‘contramarcha’.
“En el caso de las movilizaciones organizadas para el 8 de marzo por el Día Internacional de la Mujer, van a ser una marcha pacífica. Esperamos que exista sensatez de los otros sectores para que no tengamos que enfrentar ningún hecho de violencia”.
A la par del discurso, el Gobierno intenta demostrar su fuerza para contrarrestar la marcha del miércoles. El fin de semana, en Pujilí, organizaciones afines al Régimen se concentraron para apoyar al presidente Correa.