Los intentos del Ecuador por conseguir el apoyo de los países latinoamericanos para reformar al Sistema Interamericano de Derechos Humanos (SIDH) nuevamente se desvanecen.
Ayer, a la reunión de los países miembros del Pacto de San José, donde se gesta este Sistema), fuera del canciller Ricardo Patiño, solamente asistieron sus pares de Uruguay, Luis Almagro; de Argentina, Héctor Timerman; y de Haití, Pierre Richard Casimir.
Esto, a pesar de la gira que Patiño hizo la semana pasada por siete países del Caribe y de América del Sur, en busca de respaldo para sacar adelante sus propuestas de cambios.
Incluso, el 15 de enero, la Cancillería informó que luego de la visita de Patiño, el jefe de la diplomacia de Guatemala, Luis Fernando Carrera, “confirmó la participación de su país en la reunión de Estados Parte del Pacto de San José”. Pero él no llegó a la cita de ayer.
De los 24 países que son parte de este Pacto, es decir los que han ratificado la Convención Americana de DD.HH, solo acudieron delegados de 14. La mayoría, representantes ante la Organización de Estados Americanos (OEA) o embajadores de esas naciones en Uruguay. Es decir, funcionarios de menor rango político.
La reunión de Montevideo, que tiene previsto terminar hoy, sirvió para conocer los avances sobre las propuestas para modificar al Sistema Interamericano. Es decir, que todos los países miembros de la OEA ratifiquen la Convención, así como ver la posibilidad de que se modifique la sede de la Comisión Interamericanade DD.HH. (CIDH) a un país miembro del Pacto de San José, y que no siga en Washington.
El tercer punto de la reunión fue la limitación del financiamiento del Sistema solo a los países que ratificaron la Convención. Por ahora, el Sistema lo sostienen principalmente EE.UU. y ONG de ese país.
Al inicio de la reunión, Patiño cuestionó que el grupo que estaba a cargo de tratar el tema de la universalización de los DD.HH. no haya presentado un informe sobre los avances en esta área. En esa comisión estaban Haití, Uruguay, Guatemala y México. Su misión era que todos los países del continente ratificaran la Convención, entre ellos EE.UU., así como los que dejaron el sistema: Trinidad y Tobago y Venezuela.
Sobre el cambio de sede de la CIDH, Ecuador y Uruguay trabajaron en los mecanismos de financiamiento que permitan el traslado de las oficinas a otra nación. Según algunos cálculos, esto implicaría una inversión de USD 1,4 millones. Según explicó en meses pasados José Miguel Insulza, secretario de la OEA, la CIDH trabaja con funcionarios y recursos de la Organización, por no tener fondos suficientes.
Este tema está atado al financiamiento exclusivo para la OEA, que ha sido uno de los que menos consenso obtuvo ya que los países pequeños, principalmente los caribeños, deberían aportar más dinero si EE.UU. y Canadá dejasen de dar su cuota anual. En octubre pasado, la OEA determinó que para el 2014 su presupuesto sería de USD 80 millones. De ellos, Ecuador tendrá que aportar con USD 208 390.
Estos temas serán analizados hoy durante la reunión, que culminará con una declaración conjunta. El canciller uruguayo, Luis Almagro, el único de los participantes que se dirigió a los medios, definió el encuentro como “informal” para tratar el funcionamiento de la CIDH.
Según indicó, la posición expresada por varios países, entre ellos Uruguay, es la de que la CIDH debe hacer “una autocrítica fuerte” por haber sido “injusta” en numerosas ocasiones y por no haber actuado en algunos casos “donde tendría que haberlo hecho”. “En ese marco se da una circunstancia un poco particular y es que la Comisión está en un país que no es parte de la Convención y eso es algo que es discutido por muchos países”. El cambio de sede de la CIDH tuvo apoyo en la OEA, pero no ha pasado de la intención. Argentina, Perú y Costa Rica dieron su apertura.
Almagro dijo ayer que se buscará fortalecer al Sistema Interamericano, para que se adapte a la realidad actual, destacando el “significado sustancial que tiene para el continente su existencia desde 1959”.
Los acuerdos que salgan de esta cita se someterán al debate en la Asamblea General de la OEA, a realizarse en Paraguay en junio de este año.
En contexto
La tarde del lunes, el secretario jurídico de la Presidencia, Alexis Mera, advirtió con que Ecuador abandonaría la CIDH si no se encuentra el ambiente para impulsar los cambios que se buscan. El año pasado, el presidente Rafael Correa hizo una declaración similar.