Ecuador y Estados Unidos, que expulsaron a sus respectivos embajadores en abril de 2011, expresaron su deseo de mejorar las relaciones tras la presentación hoy de las cartas credenciales por parte del nuevo representante de Washington en Quito, Adam Namm.
“Lo recibimos con respeto y esperamos tener la oportunidad de mejorar nuestras relaciones”, dijo el canciller Ricardo Patiño tras el acto celebrado en el Palacio de Najas, sede del ministerio de Relaciones Exteriores.
Por su parte, el embajador manifestó que “trabajará para fortalecer los vínculos en los ámbitos político, económico, de seguridad, comercio y migratorio, entre otros”, según un boletín de la cancillería.
“Siempre me ha gustado Ecuador, es un país lindo, la gente es amable y estoy listo para trabajar”, añadió.
Las relaciones entre los dos países se enfriaron luego de que la anterior embajadora norteamericana, Heather Hodges, fuera expulsada en abril de 2011 a raíz de un cable diplomático sobre Ecuador revelado por WikiLeaks.
En ese reporte, la diplomática hizo alusión a supuestas irregularidades en el nombramiento de un jefe policial por parte del presidente socialista Rafael Correa. En represalia, Washington expulsó al embajador ecuatoriano, Luis Gallegos.
El incidente duró cinco meses, hasta que en septiembre ambos países anunciaron que nombrarían nuevos embajadores para recomponer los nexos. En enero pasado, la representante ecuatoriana en Estados Unidos, Nathalie Cely, inició sus funciones.
Quito busca la extensión de las preferencias arancelarias andinas (Atpdea) , que Estados Unidos otorga en contraprestación por los esfuerzos antidrogas, las cuales concluirán a mediados de 2013.