Con música protesta se trataba de animar la mañana de ayer, en el parque El Arbolito. Artistas sobre la tarima invitaban a los presentes a bailar y a corear canciones.
Allí se concentraba la marcha convocada por la Confederación de Trabajadores del Sector Público. En el centro del parque estaban desplegadas banderas de Ecuador, Cuba y Venezuela.
En uno de los senderos del sitio, la comerciante Jaqueline Neira trataba de vender jugo de coco. “No se ha vendido nada”, mencionaba. Ella vive en Carapungo y le tomó una hora llegar al sitio. No es partidaria del Gobierno, “lo que me interesa es vender”.
Ayer, el parque se convirtió en un minimercado. Se vendía de todo. Por ejemplo, junto a Neira, Blanca Barrera improvisó una cocina y ofrecía guatita a USD 1. A las 09:30 una olla ya estaba vacía.
Salomé Delgado, trabajadora pública, se declaró fanática del presidente de la República, Rafael Correa. Ella vive en la Quito Norte, pero no quiso decir en dónde trabaja. Para llegar a El Arbolito tomó una unidad del Sistema Integrado Trolebús. “No tuve problemas para estar aquí, las calles del norte están vacías”.
Antes de las 10:00, la av. 6 de Diciembre estaba despejada. En el parque El Ejido, Jorge García, quien vive por los alrededores, aprovechó el feriado para ejercitarse. “Ya soy jubilado, pero ni loco marchaba con los del Gobierno”, comentaba. Al igual que García, María Solórzano también aprovechaba el martes de descanso para jugar con sus tres hijos.
Ella es moradora de La Vicentina, en el centro norte, y llegó al parque caminando. “Para qué voy a marchar, pudiendo aprovechar el tiempo con mi familia”.
El parque El Ejido se convirtió en una zona neutral. Por el costado oriente, en el parque El Arbolito, estaban partidarios del Gobierno y por el occidente, en la av. 10 de Agosto, la marcha convocada por el Frente Unitario de Trabajadores (FUT) gritaba consignas en contra del Presidente.
La marcha del FUT salió desde la Caja del Seguro Social a las 09:00, como estaba previsto. En el trayecto se veían papeles y vasos desechables tirados en el suelo.
Algunos manifestantes, que iban encapuchados, encontraron en las paredes de la av. 10 de Agosto y de la calle Guayaquil un pizarrón para impregnar con aerosol sus consignas en contra del Régimen. Frases como: “Gobierno Burgués= Basura”, se leían.
Keyla Hidalgo, comerciante del Gran Pasaje, un complejo comercial ubicado frente a la Plaza del Teatro, se quejaba de que no vendía nada hasta las 11:00. Al igual que Hidalgo, Denisse Pérez también trabajó ayer. Ella abrió el local de zapatos, Creaciones Patricio, a las 09:00. Pero hasta las 11:15 de ayer no tenía clientes.
En la calle Venezuela no existía tránsito vehicular. En la Plaza Grande, junto al Palacio Arzobispal, una tarima con pantalla gigante esperaba a la marcha gobiernista. En cambio, frente a Carondelet, los héroes del Cenepa pedían ser escuchados por el Presidente.
Metros más al sur de la Plaza Grande, los fieles entraban al templo de El Sagrario. En su interior, unas 20 personas participaban de la misa.
En la iglesia San Francisco también se celebró la eucaristía, pero las alabanzas se confundieron con la cumbia villera que sonaba en el centro de la plaza. La marcha del FUT había llegado hasta ahí.
Luego de la caminata, cerca de las 12:30, dos unidades de la Empresa Metropolitana de Aseo (Emaseo) realizaron la limpieza de las calles del Centro.