El futuro de la relación con Ecuador, en caso de que el candidato presidencial del oficialismo, Juan Manuel Santos, triunfara en los comicios del 30 de mayo, gana más espacio en el debate colombiano.El tema ha cobrado tal importancia que, en las últimas horas, el resto de aspirantes a la Casa de Nariño ha transparentado sus posturas frente a la situación judicial de Santos en Ecuador y sobre el ataque a Angostura del 2008.
Mientras tanto, el presidente Rafael Correa anticipó ayer que una eventual elección del ex Ministro de la Defensa dificultará el proceso de normalización de relaciones diplomáticas.El martes por la noche, en un debate organizado por Canal Caracol, esta polémica se llevó uno de los segmentos de la discusión. En el set estuvieron Santos (La U), Antanas Mockus (Partido Verde), Noemí Sanín (Conservador), Gustavo Petro (Polo Democrático), Rafael Pardo (Liberal) y Germán Vargas (Cambio Radical).
Todos, incluido el izquierdista Petro, cuestionaron el hecho de que la Justicia ecuatoriana tratara de juzgar a Santos por una incursión militar que, según consideran, fue una acción de Estado. Por ello, calificaron de inoportunas y como una injerencia las declaraciones del martes del presidente Correa. Él dijo apoyar la investigación que impulsa la Justicia.Los candidatos, incluso, analizaron la posibilidad de suscribir un documento para exigir que ningún otro país intervenga en asuntos internos colombianos. Fue en ese punto cuando quedó en evidencia las diferencias de fondo que hay entre los postulantes sobre el bombardeo a la base clandestina del jefe guerrillero Raúl Reyes, que marcó la ruptura de las relaciones.
Mockus y Petro dijeron estar de acuerdo en firmar dicho documento con los demás candidatos, siempre y cuando se incluyera como un punto de compromiso el no volver a intervenir ni violar la soberanía de otros estados.
Para ambos postulantes, al igual que la conservadora Sanín, el bombardeo a Angostura fue una clara violación al derecho internacional y, por lo tanto, Colombia debe responder como Estado.Cuando llegó su turno, Santos dejó en claro que, para él, el ataque del 1 de marzo del 2008 en territorio ecuatoriano no fue una violación al derecho internacional. “Otro día podemos discutir. Hay tesis encontradas, en eso creo que hay un debate interesante”.Pero la polémica por la situación jurídica de Santos en Ecuador no quedó ahí. Ayer, el tema tomó más brío a raíz de la publicación de una entrevista concedida por Correa a la agencia española Efe. En ese diálogo, reproducido por todos los portales electrónicos de los medios colombianos, el Presidente ecuatoriano adelantó que una eventual elección de Santos se constituirá en un problema para la relación bilateral.
“Yo no quiero inmiscuirme en las elecciones colombianas, les deseo el mayor de los éxitos, que sea una fiesta democrática, pero es innegable que (un triunfo de Santos) va a ser un problema”.
Santos, al ser interrogado por estas declaraciones, respondió a RCN Radio: “Saludos a Correa”.