El martes 18, César Ricaurte recibirá un segundo reconocimiento. Esta vez, la editorial argentina Perfil le entregará el galardón a la Libertad de Expresión Internacional.
En agosto, el Director de Fundamedios ganó el Gran Premio a la Libertad de Prensa 2012.
Cada año, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) confiere este homenaje a una persona u organización con logros significativos a favor de la causa de la libertad de prensa.
Ricaurte y Fundamedios se convirtieron en blanco de las críticas del presidente Rafael Correa después de una audiencia en Washington, en el 2011 ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. En ella, la ONG acusó al Gobierno de ataques “sistemáticos” a la prensa.
“No ha sido blanco de ningún ataque. Ricaurte ha defendido los intereses de ciertos medios. No de todos los periodistas. ¿Dónde estuvo cuando agredieron a reporteros de Telesur o cuál ha sido su posición en el caso de Julián Assange, fundador de Wikileaks?”.
Eso dijo el asambleísta de Alianza País, Mauro Andino, a cargo de la mesa de Comunicación.
En una entrevista anterior con este Diario, Ricaurte señaló que desde el 2007, cuando Correa asumió el poder “se sintió un discurso antimedios, pero no se pasó a la acción”. Eso ocurrió cuando la Asamblea Constituyente de Montecristi ordenó la aprobación de la Ley de Comunicación, que aún no ha podido ser votada.
En mayo, por el Día Internacional de Prensa, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, citó las “amenazas y hostigamiento” sufridos por Ricaurte y pidió al Gobierno de Ecuador que respete la libertad de prensa.
El presidente Correa salió al paso diciendo que era una “vergüenza que Obama respaldara a periodistas informantes”. Esto en relación a unos cables de la Embajada norteamericana en Quito filtrados por Wikileaks, en los que se citaba información proporcionada por Fundamedios.