Francisco Díaz Garaycoa. Ex ministro de Trabajo
Redacción Negocios
¿Cuál es su diagnóstico sobre el desempleo en el país?
El tema del empleo es una asignatura pendiente en el mundo. No lo ha resuelto nadie. Cuando parece que está en vías de aliviarse surgen elementos nuevos que lo vuelven a afectar. En Ecuador es un problema estructural, ligado a insuficiencia de generación de riqueza, que es un elemento esencial. Y la verdad es que este tema no se ha afrontado de manera seria. Ecuador no tiene ni ha tenido una política de empleo. En otros países el desempleo genera alarmas, pero en países como el nuestro causa apenas una cierta preocupación.
¿Cómo se explica eso, si incluso, la nueva Constitución apunta a generar un trabajo digno y estable?
La Constitución anterior también lo decía, y también la de 1979. Todas ellas tenían proclamas para avanzar hacia el pleno empleo, hacia el empleo decente, pero en la práctica no se ha concretado. El país requiere mecanismos de diálogo social para resolver los grandes temas como el desempleo y no solo cuando hay conflictividad laboral.
¿Por qué está aquí?
Su experiencia. Abogado. Ha representado a empresas privadas de varios sectores. Fue ministro de Trabajo y Recursos Humanos.
Su punto de vista. La política laboral en el país requiere de un diálogo social para que los acuerdos se mantengan. El enfoque estatista del actual Gobierno es errado.
¿En qué está fallando el diálogo social?
Los actores: Gobierno, empresarios y trabajadores tienen distintos enfoques. La generación de empleo no es el objetivo prioritario para los empresarios, cuya misión es mantener sus empresas productivas y eficientes. A las organizaciones de trabajadores les preocupa mantener y mejorar las condiciones de aquellos que ya están empleados, que en el país son un grupo minoritario. Y los gobiernos, en la práctica, si bien hacen grandes proclamas sobre el tema, no toman medidas eficaces para generar empleo productivo, que no es lo mismo que el empleo burocrático.
¿Qué medidas, por ejemplo, han afectado la generación de nuevos empleos?
La actual Constitución, por ejemplo, privilegia la inversión pública sobre la privada. Allí ya tenemos una luz para saber que el propósito del Gobierno no es precisamente estimular la inversión privada para crear nuevas fuentes de empleo.A eso se suman medidas como las continuas reformas tributarias, la denuncia de convenios sobre protección de inversiones, cambios extremos en la normativa laboral, etc.
¿Cómo afectó el cambio en la normativa laboral?
El Mandato 8 trataba de corregir los excesos que hubo en materia de contratación laboral, pero los pronunciamientos absolutos no dejaron espacio para el debate y condujeron a eliminar el trabajo por horas y la tercerización.
Pero era necesaria una regulación, pues hubo excesos en la contratación laboral …
Los excesos estaban en la intermediación. Esta figura pasó a ser una regla general de contratación, cuando debió ser la excepción. En lugar de corregirla se decidió suprimir todo, lo cual causó un remezón en las empresas y en el sector productivo privado.
¿En qué se reflejó eso?
Aunque muchas empresas contrataron directamente a quienes estaban intermediados o tenían contratos por horas, también optaron por dejar de contratar o reducir sus actividades. Ahí no solo se destruyó empleo, sino que se afectó la creación de nuevas plazas de trabajo, que es más grave.
Los últimos anuncios del Gobierno, de pagar los décimos cada mes, de reducir las comisiones sectoriales, la definición de un salario digno, ¿configuran una política laboral?
Se está viendo una parte de la gran problemática laboral, lo cual es una iniciativa positiva, ya que el país ha estado acostumbrado a muchas partes. Pero previamente se debió acudir a mecanismos de diálogo social para que las propuestas tengan el mayor consenso posible. En la medida que esas decisiones no sean apreciadas por los actores sociales aparecerán los problemas, porque nadie las defenderá al no sentirse parte de las decisiones.
¿Cómo ve el manejo del denominado salario digno?
Este tema no está claro, pues no se definen los mecanismos para calcular ese salario. Se hablaba de USD 320, pero ahora está en 330, porque la canasta básica se mueve cada mes. Debiera establecerse una canasta para todo el año, caso contrario el salario digno debiera ajustarse cada mes.