Los agentes solo revisaron cuatro locales de los más de 200 que existen en el Centro Comercial. Foto: Eduardo Terán/EL COMERCIO
Un grupo de al menos 30 policías ingresó de forma sorpresiva en las instalaciones del Centro Comercial Montúfar, ubicado en el sector de La Marín, en pleno Centro Histórico de Quito, la tarde de este miércoles 31 de mayo del 2017.
Se trataba de un operativo de control para evitar la venta de objetos robados entre la mercadería, mucha de esta de segunda mano, que allí se comercializa. En esta operación fueron detenidas tres personas, dueños de locales de venta y reparación de celulares, quienes no pudieron justificar la propiedad o legalidad de los teléfonos.
Los agentes solo revisaron cuatro locales de los más de 200 que allí existen. En esos lugares se logró el decomiso de 25 teléfonos reportados como robados, 2 computadoras portátiles, dos cámaras fotográficas, un teclado, una radio de vehículo y una maleta.
Según el oficial Hernán Cepeda, director de operaciones del Distrito Manuela Sáenz (Centro), las investigaciones previas determinaron que había actividad sospechosa en esos cuatro locales comerciales, en donde aparentemente se ofrecían celulares robados.
El resto de los locales no fueron revisados. Una de las razones fue por que los comerciantes recibieron una señal de alerta segundos después de que ingresaran los uniformados.
De forma inmediata, guardias de seguridad y administradores alertaban a los propietarios de los negocios por radios de comunicación y hasta por el altoparlante. Se advertía a los dueños sobre la presencia de los policías y se les iba informando los pisos hacia donde se dirigían.
Minutos después, todos los locales comerciales estaban cerrados: los dueños bajaron las puertas metálicas enrollables y en algunos casos se quedaron adentro con los clientes mientras se desarrollaba el operativo.