Los billetes de USD 5, 10 y 20 son los más deteriorados en el país. Foto: Pavel Calahorrano/ EL COMERCIO
Hasta las 17:30 de hoy, viernes 21 de octubre del 2016, el Banco Central del Ecuador (BCE) receptará los billetes deteriorados para canjearlos por nuevos. Desde la próxima semana ya no se receptarán los billetes laminados o que estén muy deteriorados.
Según Jeaneth Maldonado, subgerente de Servicios del BCE, desde el pasado 8 de septiembre que inició el proceso de canje, se atendieron a cerca de 60 mil personas. Esto representó un canje de billetes por un monto de USD 206 millones en billetes. De estos, los billetes laminados fueron cerca de 240 mil por un monto de USD 3 millones. Los billetes de USD 5, USD 10 y USD 20 fueron los más canjeados durante el proceso.
El proceso es ágil. Quienes llegan hasta el Banco Central toman un turno y son atendidos en máximo 10 minutos en una de las seis ventanillas que estarán disponibles hasta la tarde de hoy. Eliana Viscarra fue una de las personas que se acercó al medio día. Le interesaba cambiar un solo billete de USD 5, lo cual le tomó siete minutos.
Hasta la tarde de hoy, la gente continúa llegando para efectuar el canje. Maldonado señaló que todos los billetes que se presentaron fueron cambiados. Esto pese a que no todos estaban en completo deterioro.
Entre los billetes que llegaron hasta hoy, se encontró de todo. “Hubo billetes completamente cubiertos de tinta, ensangrentados y otros que se deshacían por la cantidad de tiempo que estuvieron guardados en malas condiciones”, dijo Maldonado.
Desde mañana, sábado 22 de octubre del 2016, ya no se receptarán los billetes laminados. Es decir, aquellas especies que tienen un exceso de cinta o cualquier material utilizado para unir sus partes.
Durante lo que va del 2016, el BCE reportó a la Reserva Federal de los Estados Unidos, 92 mil billetes laminados. Según Maldonado, con esta campaña se esperaba recibir el doble de esa cantidad. Sin embargo, los canjes hechos superaron esa expectativa.
“Este fenómeno demuestra que hay mucha gente que opta por tener el dinero en casa, lo cual no es lo más adecuado. También muestra que hay personas que no confían en el sistema bancario”, señaló.