Peregrinos empezaron caminata de fe a El Quinche la noche del 17 de noviembre

La Panamericana Norte en sentido Quito - Guayllabamba, fue ocupada por los primeros peregrinos hacia El Quinche. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO

La Panamericana Norte en sentido Quito - Guayllabamba, fue ocupada por los primeros peregrinos hacia El Quinche. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO

La Panamericana Norte en sentido Quito - Guayllabamba, fue ocupada por los primeros peregrinos hacia El Quinche. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO

Los carros dejaron de circular por la Panamericana Norte en sentido Quito - Guayllabamba, en el sector de la Coca Cola, la noche de este viernes, 17 de noviembre del 2017, y la vía fue ocupada por los primeros peregrinos hacia El Quinche.

Johana Toledo y su esposo fueron de los primeros caminantes. “Salimos temprano (18:20) para poder llegar a la misa de 01:00 y regresar pronto porque mi esposo tiene que trabajar mañana.

La pareja realiza esta caminata de fe para agradecer a la Virgen de El Quinche por un milagro recibido. “A mi hija le detectaron cálculos, le pedí a la Virgen por su salud y cuando le operaron ya no tenía nada”.

Marcelo Daza también empezó la romería temprano. Señala que al ir con su esposa debe caminar despacio y por ello espera llegar al santuario mariano a las 03:00 del sábado 18 de noviembre.

Aunque Daza no es quiteño le tiene gran devoción a la Virgen de El Quinche desde hace cuatro años, pues fue ahí cuando hizo su primera romería. “Ahí le pedí que me ayudara porque no tenía trabajo y así lo hizo”.

Para este año se preparó con bebidas y alimentos, pastillas para el dolor de piernas, dos chompas gruesas, un gorro de lana y no podían faltar unos zapatos cómodos.

María Quiyupangui acudió a la caminata acompañada de sus hijos y sus nietos, además decidió llevar a su pequeña mascota. “Estamos todos juntos en este acto de fe porque la Virgen siempre ha sido buena”.

Las ventas ocuparon la acera y la calzada. Gorros de lana, bufandas, guantes, chompas y cobijas fueron algunos de los productos ofertados para combatir el frío de la noche y la madrugada.

Para quienes buscaban algo de comer la oferta era variada: guatita, almejas, pollo asado, pinchos y salchipapas se ofrecían a los feligreses.

Otros comerciantes en cambio vendían productos que otorguen energía a los caminantes como guineos, chocolates y barras energéticas.

En esta ocasión la venta de cargadores portátiles tuvo gran acogida. “En una hora ya vendo como diez cargadores. La gente ahora no se despega del celular”, comentó Andy Chasig.

En algunas viviendas colocaron letreros para alquilar las baterías sanitarias por USD 0,50.

Ya a partir de las 19:30 el ruido de los vehículos empezó a disminuir, los pocos que transitaban desde el intercambiador de Carapungo, circulaban por una sola hilera para poder llegar a sus viviendas ubicadas antes del cierre de la vía.

En cambio los vehículos que llegaban hasta el sector de la Coca Cola y su intención era continuar por esa ruta, fueron desviados nuevamente hacia Quito.

“No entiendo para qué nos permiten avanzar tanto si nos van a regresar a Quito. No debían dejar pasar desde el intercambiador y así nos evitábamos todo este tráfico”, dijo Melany Sánchez, quien esperaba poder llegar a Cayambe.

Suplementos digitales