El gerente de Petroecuador, Pedro Merizalde, negó haber cometido un supuesto perjurio al no declarar como suya una empresa en paraísos fiscales. En un comunicado, anunció que solicitará el archivo del caso a la Fiscalía. Foto: Diego Pallero/ EL COMERCIO
El gerente de Petroecuador, Pedro Merizalde, negó haber cometido delito, infracción u omisión en sus declaraciones patrimoniales juramentadas. Esto lo dijo mediante un comunicado de prensa, emitido este 30 de noviembre del 2016, luego de que se conoció que la Contraloría emitió un informe con indicios de responsabilidad penal y con base en este documento la Fiscalía abrió una indagación previa por presunto perjurio.
Como parte del examen especial a sus declaraciones, señaló que se subsanó una “omisión involuntaria” con documentación presentada a la Contraloría el pasado 28 de junio. Por esta razón solicitará a la Fiscalía el archivo del caso.
Carlos Pólit, contralor (con licencia), durante su comparecencia en la Asamblea, no dio mayores detalles sobre este proceso, pues se encuentra en indagación previa en la Fiscalía.
Sin embargo, explicó que cuando “un funcionario público no declara un bien, una empresa que poseía en Panamá eso configura un posible delito de perjurio”.
La Fiscalía también confirmó la indagación contra Merizalde por perjurio a través de un boletín de prensa.
Merizalde explicó que el 30 de junio de 2016, mediante rueda de prensa, explicó que la offshore que se creó en Panamá fue cerrada el 21 de julio de 2016, sin que haya tenido ningún movimiento como lo acreditaron las autoridades panameñas.
“Cuando he sido requerido he presentado la información y las explicaciones correspondientes ante todas las instancias, dejando clara constancia que no he cometido ningún delito o infracción”, enfatizó el gerente en el comunicado.
Adicionalmente, aclaró que la Contraloría no encontró un incremento patrimonial no justificado en sus declaraciones, tras el análisis de cinco años, como funcionario público.
Citó parte del informe del órgano de control en el que dice que no se observó “elementos objetivos que sustenten un incremento patrimonial no justificado porque los movimientos económicos son razonables (…) son coherentes con los ingresos propios provenientes de sus remuneraciones y de su actividad personal”.