El papa Francisco afirmó que la teoría científica del ‘Big Bang’ sobre el origen del universo no se contradice con la intervención de Dios, sino que la exige. Foto: EFE
El papa Francisco denunció el exilio forzado de los cristianos “expulsados de Oriente Medio” en un discurso por video que será divulgado el sábado en Erbil con motivo de una visita del cardenal Philippe Barbarin al Kurdistán iraquí.
“Los cristianos están siendo expulsados de Oriente Medio, en medio del sufrimiento”, dijo con emoción el Papa, quien señaló la responsabilidad de los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI), aunque sin nombrarlo.
El papa Francisco pidió más convergencia internacional” sobre los conflictos en Oriente Medio, en un videomensaje enviado a los cristianos refugiados en Erbil por la persecución del grupo yihadista Estado Islámico (EI).
El pontífice urgió una solución “a los conflictos que desangran vuestras tierras de origen” en ese mensaje, presentado en la ciudad del Kurdistán iraquí por el cardenal francés Philippe Barbarin, en una visita a los cristianos de Mosul (Irak) que están allí refugiados.
Pidió a la comunidad internacional que favorezca una solución que haga posibles “las condiciones para que puedan quedarse o volver” a los miembros de la minoría cristiana refugiados en Erbil, según la transcripción del mensaje difundida por la oficina de prensa vaticana.
“Como líderes religiosos, tenemos la obligación de denunciar todas las violaciones de la dignidad y de los derechos humanos”, dijo el papa argentino, quien recordó que en su reciente viaje a Turquía había manifestado que los cristianos y los yazidíes son “expulsados por la fuerza de sus casas”.
Los yazidíes son una minoría de etnia kurda cuya religión se basa en el zoroastrismo. Más de 500 000 de ellos y de otras religiones minoritarias han huido del norte de Irak desde junio pasado y otros cientos han sido asesinados, según datos de la ONU.
El pontífice volvió a repetir lo que dijo durante su viaje a Turquía, que “parece que no quieren que haya cristianos” en esa región, y atribuyó la persecución a “un grupo extremista y fundamentalista”.
El papa denunció que “comunidades enteras, especialmente -pero no solo- cristianos y yazidíes, han sufrido y todavía sufren violencias inhumanas por su identidad étnica y religiosa” y recordó que ello ha “golpeado también edificios sagrados, monumentos, símbolos religiosos y patrimonio cultural”. Y ello con el propósito de “casi querer borrar cualquier rastro, cualquier memoria del otro”, agregó el papa en su mensaje por vídeo.