El consumo de alcohol ocupa el tercer lugar entre los factores de riesgo de morbilidad en el mundo, luego de la insuficiencia de peso en los niños y las prácticas sexuales peligrosas.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), es un factor determinante de trastornos neuropsiquiátricos, como la epilepsia y causa enfermedades cardiovasculares, cirrosis hepática y diversos cánceres.
¿Quiénes están en riesgo de su consumo nocivo? ¿Qué estrategias se organizan para combatir su incidencia? Un informe de la OMS -organismo que alertó este lunes que Ecuador ocupa el noveno puesto de consumo en la región- revela que la edad, el sexo y otras características biológicas determinan los distintos grados de riesgo.
De acuerdo con el documento, entran en juego el grado de exposición a las bebidas alcohólicas y las circunstancias y el contexto en que se produce la ingestión de licores.
Así, el consumo de alcohol ocupa el tercer lugar mundial entre los factores de riesgo de enfermedades y discapacidad, en América tiene el primer lugar y en Europa, el segundo.
A escala mundial, unos 320 000 jóvenes entre los 15 y los 29 años de edad mueren de causas relacionadas con el alcohol, lo que representa un 9% de la mortalidad en este grupo.
En Ecuador, un estudio comparativo de patrones de consumo de licor, efectuado por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), mostró que el 71% de personas en el país consumen licor. De ese porcentaje, el 7% corresponde a personas con un consumo nocivo frecuente.
La psicóloga Lourdes Tapia sostiene que el consumo de bebidas alcohólicas genera adicción en todas las edades, pero esto se vuelve casi incontrolable cuando la ingestión se hace frecuente en la adolescencia.
La OMS entonces elaboró un documento para organizar estrategias contra su consumo nocivo en el mundo. El fin es disminuir los índices de ingesta por año. En Ecuador, por ejemplo, es de 7,2 litros.
Así en el proyecto se toman en cuenta cambios en el control de la publicidad de los licores, la comercialización, el control de las autoridades, la prevención en los centros de salud y la reducción de puntos en las licencias de conducir.
De hecho, hay un énfasis en el control de las autoridades de los países, tanto nacionales como municipales. En Ecuador el año pasado se realizaron charlas con respecto a esta temática. El Municipio de Cuenca, por ejemplo, las hizo en los mercados con psicólogos y facilitadores. Allí se enfocaron en el tema de padres e hijos adolescentes.
24 países son los que más consumen licor, según la OMS.