Redacción Quito
El muro de La Recoleta luce igual que antes pero tiene un toque más moderno en su infraestructura. Ahora cuenta con áreas verdes además de un mirador.
El lugar está ubicado en la avenida Pedro Vicente Maldonado y Upano. Allí puede acceder cualquier persona que desee apreciar el panorama del sector de la Colina, en el sur de la ciudad.
La obra empezó en abril y debió culminar en septiembre, luego en diciembre se aplazó nuevamente. En el muro trabajaron 80 personas en dos turnos seguidos para agilitar la obra. En este proceso se invirtieron USD 302 754
Franklin Cárdenas, subdirector del Fondo de Salvamento (Fonsal), explicó que la obra se terminó hace tres semanas aproximadamente. Acotó que para que el muro sea inaugurado hace falta la implementación de un sistema de energía eléctrica, lo que, según el funcionario, se espera gestionar en la siguiente semana.
La obra es un muro estructural de piedra que está anclado y que sirve para estabilizar el talud. Para evitar que el impacto de la piedra sea demasiado fuerte en el entorno en el que se encuentra, colocaron una malla geosintética verde.
Con el fin de llenar los espacios que ocupa la malla, se hizo una hidrosiembra, que son unas plantas rastreras. El objetivo de este muro de piedra es mantener firme el conjunto de iglesias que se encuentran ubicadas encima de la construcción.