Nubia Villacís, presidenta del CNE, mostró el viernes la papeleta para la consulta. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
El viernes, 1 de diciembre, se inició el período electoral de la consulta popular. El Consejo Nacional Electoral (CNE) se convirtió en la máxima autoridad del país y Nubia Villacís, su titular, en la figura con más poder.
Ella es la única que puede convocar las sesiones del CNE y solamente en esa instancia, el pleno puede adoptar cualquier tipo de decisión.
Villacís llegó al CNE el 29 de noviembre de 2011, junto con Domingo Paredes, Juan Pablo Pozo, Roxana Silva y Paúl Salazar, como titulares de la entidad, y otros cinco suplentes.
Habían ganado el primer concurso organizado por el Consejo de Participación Ciudadana. En ese entonces, los concursos eran más complejos, sostiene Villacís.
Recuerda que participó en tres. Dos sin éxito: para las comisiones de selección del Fiscal y del mismo CNE. En la tercera ocasión, en cambio, fue la segunda mejor puntuada, aunque tampoco esperaba ganar. Postuló por la novedad de los concursos.
Algo similar pasó con su carrera. No tenía planeado ser periodista, quería ser abogada. Pero, para salir de su casa, primero debió estudiar para profesora, bajo pedido de su familia. Y después, también por circunstancias externas, ingresó temporalmente a estudiar Comunicación Social en la Universidad de Guayaquil.
Terminó los estudios y eso la llevó a trabajar en varios medios de comunicación, desde 1994 hasta 2004. Pasó por Gamavisión, SiTv Canal 12, radio Tropicana, Teleradio y Canal 5.
Después continuó en el sector privado, como relacionadora pública y asesora hasta 2008. Luego ocupó su primer cargo en el sector público en el Instituto Ecuatoriano de Crédito Educativo y Becas, como especialista en Crédito y Becas, hasta el 2011. A la vez hacía labor comunitaria para la Asociación De Productores Agropecuarios Graneros de Chone.
Ella es originaria de ahí. Se reconoce como montuvia, calidad con la cual participó en los concursos.
A su llegada al Consejo, Paredes asumió la Presidencia y Salazar la Vicepresidencia. Mientras el primero dirigía el organismo, Salazar era el experto en la parte técnica y Pozo en lo legal. El perfil mediático de Villacís se mantuvo bajo.
Ella se dedicó a temas sociales como la democracia intercultural y comunitaria, el voto facultativo y la participación política de la mujer, hasta 2014.
Ese año adquirió mayor protagonismo al ser una de las encargadas del proyecto piloto de voto electrónico en las elecciones seccionales, en Santo Domingo, sin dejar de lado los otros temas.
Se esperaba que el plan permita su implementación a escala nacional, pero no se llegó a concretar. Según el CNE, por falta de fondos.
Menos de un año después, en enero de 2015, Villacís se volvió más visible al llegar a la Vicepresidencia del CNE.
Pozo ocupó el despacho presidencial hasta el miércoles pasado (29 de noviembre). Ocurrió tras la breve presidencia de Salazar, quien reemplazó a Paredes tras su salida del organismo por sorteo. Y el entonces nuevo consejero Mauricio Tayupanta fue designado vicepresidente.
Pero Villacís y Pozo se quedaron con los cargos una vez que el pleno fue reconfigurado, tras la renuncia de Gloria Toapanta y la titularización de Ana Marcela Paredes.
Por segunda ocasión, otra reconfiguración del Consejo llevó a Villacís a escalar un peldaño más en la entidad. Sucedió tras la retirada de Pozo y la titularización de la suplente Luz Haro. Por primera vez, en la historia del organismo electoral (68 años), una mujer ocupa la presidencia de la autoridad electoral. Para Villacís, esto es el resultado de un arduo trabajo y reconocimiento.
Aunque, admite, ayudó también el hecho de que haya tres mujeres en el CNE, convirtiéndolas en mayoría. Pero reconoce el apoyo de sus compañeros, quienes renunciaron a sus “justas aspiraciones”.
La relación Pozo-Villacís
Con el paso del tiempo, Villacís tuvo roces con su predecesor, Juan Pablo Pozo, pero pocos llegaron a ser públicos.
Por ejemplo, el 23 de febrero pasado, durante la audiencia de escrutinios, Villacís fue enfática en su reclamo por el “terrible malentendido” que, a sus ojos, causaba la cadena nacional de Pozo. En esa transmisión, él anunció la segunda vuelta electoral, cuando todavía no había finalizado el conteo oficial de votos.
Además, fue una de las principales críticas en torno a la intención del anterior presidente del CNE de crear partidas para contratar 698 funcionarios, tras el Decreto Ejecutivo de austeridad.
Sobre si seguirá o no con ese proceso, ella comentó que se creará una comisión técnica para “analizar el fortalecimiento institucional”.
Trayectoria. Inició su trabajo en el sector privado, en varios medios de comunicación. También fue relacionadora pública y asesora en comunicación. En 2008 ingresó al IECE y en 2011 al CNE.
Estudios. Licenciada en Comunicación Social, por la Universidad de Guayaquil. Tiene Maestría en Comunicación y Desarrollo y un diplomado en Asistencia Electoral y Observación Internacional.