Los familiares de una de las víctimas del accidente del bus de Flor del Valle llegaron el 13 mayo del 2015 a la morgue de Quito. Foto: Evelyn Jácome / EL COMERCIO.
Viajaba a Quito tres veces por semana. A sus 13 años, Kerly Gabriela G. era una apasionada del karate y, debido a los entrenamientos, debía acudir con frecuencia a la capital en compañía de su único hermano de 16 años. Ambos dedicaban su tiempo libre al deporte.
La noche del martes 12 de mayo del 2015, al salir del entrenamiento, abordaron en la Terminal un bus para regresar a su casa, donde sus padres los esperaban, en Guayllabamba. Un tío y dos primos más los acompañaban.
A las 20:20, el bus de la Cooperativa Flor del Valle, en el que la familia viajaba, se accidentó en el kilómetro 3 de la Panamericana Norte, a la altura del peaje de Oyacoto. Tres personas perdieron la vida. Entre ellas estaba Kerly.
La mañana del 13 de mayo del 2015, sus familiares acudieron a Medicina Legal para retirar su cuerpo. En medio del dolor, Lenin Cárdenas, su padrino, contó que la familia espera que las autoridades ejerzan un mayor control en las carreteras. Que se investigue el caso y que se hallen responsables.
Luego del volcamiento, el hermano de Kerly, quien solo recibió golpes, empezó a buscarla en medio de los heridos y los fierros de la unidad. Ingresó al bus y la vio. Logró sacarla de allí, pero la pequeña ya estaba sin vida.
Todos los miembros de la familia fueron atendidos por paramédicos y trasladados a casas de salud. Afortunadamente, no presentaron heridas mayores y fueron dados de alta.
Kerly, quien estudiaba en un colegio en Cusubamba, se preparaba para una competencia internacional que se llevará a cabo este fin de semana.
Otro de los pedidos de Cárdenas es que se exija a los dueños de las unidades que contraten conductores capacitados.
Cárdenas contó que al mediodía del miércoles 13 de mayo se acercaron hasta la morgue autoridades de la empresa de transporte. Les ofrecieron hacerse cargo de todos los gastos y cancelar, además, una indemnización a las víctimas.
La familia está destrozada. La menor falleció por un trauma craneal.