Ya es la tercera vez en el año que el Banco Central promociona por todo lo alto el lanzamiento (ahora sí) de un programa a través del cual el celular serviría para realizar transacciones financieras y pagos comunes en compras de bienes y servicios.
Sin embargo, en todas estas ocasiones el anuncio no ha pasado de mostrar las mutaciones del plan, que ha pasado por ser conceptualizado como billetera móvil, como banca móvil y como las dos cosas a la vez. De esto ya ha pasado un año desde que el proyecto, aparentemente quedó listo para aplicarse, según dijo en su momento el ex presidente del directorio del Central, Diego Borja.
No obstante, lo único nuevo que quedó ayer tras la presentación del actual titular del Banco Central, Pedro Delgado, fue el nombre del programa: Pago móvil.
Del resto, ya lo conocido: que con este programa será más fácil hacer retiros y depósitos de hasta USD 200 desde una cuenta de ahorros de cualquier institución afiliada a Pago móvil; pagar el consumo de servicios básicos; cobrar el Bono de Desarrollo Humano y recibir y enviar remesas.
Para que esta primera fase sea una realidad, el Central ha apostado a las cooperativas y otras redes financieras para que apalanquen el proceso. Por eso, ayer, en el auditorio del Central, Delgado explicaba a representantes de estas entidades cómo funcionaría el esquema. La idea, según el funcionario, es que los sistemas se integren a la matriz de la red que será el Banco Central. Y desde ahí, permitir que las transacciones sean casi instantáneas.
Delgado también les invitó a que hagan un inventario de los negocios o establecimientos de sus respectivas zonas geográficas, a fin de que en el futuro se vendan ahí tarjetas de consumo (similares a las de celular) que sirvan para realizar pagos por celular.
Hasta el momento, 14 instituciones de este tipo han firmado una carta de intención con el Banco Central para ingresar en el esquema de trabajo. De ellas, dos no tienen aún un diagnóstico de su plataforma tecnológica.
Adicionalmente, se espera sumar al Banco Nacional de Fomento (BNF), a Correos del Ecuador, farmacias, entre otros.