La eliminación de la informalidad, así como el control tanto de los operadores de servicios como de los puertos privados del país, son los principales objetivos de las nuevas normas de servicios portuarios en Ecuador.
El Ministerio de Transporte y Obras Públicas, a través de la Subsecretaría de Puertos y Transporte Marítimo y Fluvial, ejercerá dichos controles y dirigirá la transición que deberá darse en un año.
Este Sistema Nacional de Puertos y Transporte Acuático, regulará y controlará los servicios en puertos públicos y privados.
David Mejía, viceministro de Gestión de Transporte, explicó en Guayaquil que las nuevas regulaciones están vigentes desde el pasado 12 de abril. Y que, a diferencia de antes de los cambios, ahora las matrículas de operación serán otorgadas únicamente a empresas y no a personas.
“Hasta ahora existía bastante informalidad en la prestación de servicios portuarios. Había muchos estibadores que no pertenecían a ninguna empresa sino que trabajaban de manera individual. Eso provocaba problemas de estabilidad laboral con recurrentes casos de estibadores y otros trabajadores portuarios que emprendían acciones legales contra el puerto, las navieras…”, dijo.
Además, según el funcionario, para realizar su actividad, los puertos privados simplemente obtenían un permiso de playas y bahías, pero sin una adecuada regulación del Estado.
“Ahora podemos regularizar y trabajar con todos los operadores privados proponiéndoles estándares de eficiencia, calidad y procedimientos técnicos para prestar sus servicios”, acotó sin precisar el número de operadores y trabajadores informales actuales
Además de los puertos públicos de Manta, Esmeraldas, Puerto Bolívar y Guayaquil, en esta última existen 17 puertos privados. La nueva norma incluye también los puertos fluviales.
Mejía informó además que en ocho días saldrá a Compras Públicas la concesión del puerto de Manta. “Estábamos esperando estas normas y revisando algunos ajustes. Existen 11 operadores internacionales interesados”.